Ecologistas en Acción de Andalucía organiza el 5 de marzo unas Jornadas Informativas sobre “La otra realidad de la caza en Andalucía”. Estas jornadas se abordan como contrapunto a la Feria Intercaza, que se realiza anualmente en Córdoba con el apoyo de las administraciones públicas y que muestra un enfoque totalmente engañoso de la caza, encubriendo la verdadera realidad de la actividad cinegética en Andalucía.

En estas Jornadas se tratarán los verdaderos e inconfesables resultados de una gestión y ordenación de la caza totalmente racional y fraudulenta en muchos casos, que responde a los intereses de los cazadores, en especial de los titulares de las grandes superficies acotadas.

Lugar: Palacio de la Merced de Córdoba (Plaza de Colón, s/n)

Día: Sábado 5 de marzo

Organiza: Ecologistas en Acción de Andalucía

Patrocina: Junta de Andalucía

Colabora: Diputación de Córdoba

Entrada gratuita


INTRODUCCIÓN Y JUSTIFICACIÓN

La caza se define como la acción de cazar. La caza ha supuesto durante cientos de años el único medio de subsistencia para los humanos, salvo la extracción y recolección de ciertas especies vegetales, siempre de carácter suplementario.

La caza pasó a representar y a convertirse con el paso de los años en una liturgia, un acto social y colectivo, un motivo de preparación, veneración y festividad, en especial cuando las especies objeto de cacería eran las más peligrosas (osos, lobos, linces, etc.).

Posteriormente, la caza de subsistencia – practicada por una mayoría- llegaría a convivir con una práctica cinegética ligada a la aristocracia y la nobleza. La caza mayor de aquel entonces, donde todos los animales silvestres estaban considerados como cinegéticas, estaba reservada a la nobleza, a la casta social más privilegiada. Las especies menores, conejo, perdiz roja, liebre, etc., quedan sujetos y disponibles para la plebe, que encuentran en esta actividad un aporte proteínico en tiempos de penuria y hambre.

Ya en el siglo XX, como consecuencia del declive del sistema agropecuario tradicional, la caza junto al sector forestal se plantean como una alternativa al éxodo rural y a la crisis económica que azotaba las áreas más deprimidas (zonas de montaña y sierra).

La caza de subsistencia, junto con una práctica cinegética industrial han convivido relativamente poco tiempo. En la actualidad, la caza tiene dos variantes. Una caza de tintes “deportivos”, asociada a las entidades federativas de caza (Federación Andaluza de Caza en Andalucía) y, otra de marcado carácter economicista, sobre todo relacionado con la caza mayor (al menos, en el caso de nuestra Comunidad Autónoma). Este último modelo de caza comentado, provoca una unidad de acción sin precedentes entre los titulares y grandes propietarios de las fincas de caza de Andalucía. Las principales entidades son APROCA y ATECA. Estos colectivos con el tiempo han llegado a representar el sector más duro e intransigente respecto a otras opiniones e intereses que son frecuentemente lesionados debido a un desarrollo sin regulación adecuada de la actividad cinegética en Andalucía.

La irrupción de este nuevo modelo de caza provoca un cambio radical en el concepto y desarrollo de la propia actividad. La caza además de convertirse en el principal problema para la mayoría de las especies de aves y mamíferos silvestres de Andalucía, se convierte en un factor de tensión de primer orden que genera un deterioro y una transformación del medio a niveles parecidos a otros aprovechamientos o actividades teóricamente más lesivos para el medio natural.

El aumento en el número de cazadores, la reducción de las poblaciones silvestres de especies clave, el aumento en la demanda de espacios naturales acotados, etc., es una realidad claramente visible en diversos puntos de la geografía andaluza.

Consecuentemente, la caza se torna como una actividad agropecuaria monopolizadora, excluyente, que dificulta e impide el desarrollo de otras actividades socioeconómicas y culturales que plantean otras formas o sistemas de acercamiento al medio natural, de relacionarse con la naturaleza.

Esta realidad, de actividad excluyente y generadora de grandes y costosos impactos sobre el medio natural, se oculta con la colaboración de las administraciones que apoyan y patrocinan eventos, ferias y certámenes que potencian y trasmiten una idea surrealista, que nada tiene que ver con lo que pasa a diario en los numerosos escenarios relacionados con la caza.

En este estado de cosas, consideramos como una prioridad dentro las numerosas iniciativas de carácter informativo que desarrolla Ecologistas en Acción, la organización de unas jornadas de información, divulgativas y participativas entorno a esta actividad, donde la información este contrastada y sea fiel reflejo de la realidad rural de Andalucía.


OBJETIVOS

Objetivos generales:

1.Informar sobre los efectos ambientales negativos de la caza industrial y deportiva en Andalucía.

2.Sensibilizar a la sociedad en general de cuáles son los factores de tensión reales que genera la actividad cinegética.

3.Situar las posibles alternativas socioeconómicas a la actividad cinegética en Andalucía.

Objetivos específicos:

1.Aumentar el grado de información y concienciación en relación a la necesidad de gestionar y conservar de forma adecuada el medio ambiente.

2.Neutralizar la creciente expansión de la imagen positiva que se quiere dar a la caza que durante los últimos años se viene observando, haciendo hincapié en la necesidad de no seguir intensificando la actividad cinegética y de regularla para conseguir una conservación adecuada del medio natural.

3.Dar a conocer la situación en que se encuentran una parte considerable de la fauna silvestre mediterránea, en particular, las especies más amenazadas de extinción y sus factores de tensión.

4.Desmitificar la actividad económica de la caza ya que ésta se reduce al beneficio de la misma por parte de unos pocos, no contribuyendo realmente a la mejora del conjunto de la sociedad, ni tan siquiera de las localidades rurales de Andalucía.

5.Explicar la importancia que tiene el respeto hacia los “NO CAZADORES” personas a las que les gusta disfrutar de la naturaleza de diferente manera, y la cual se ve en muchos casos amedrentada por la práctica de la caza en algunos cotos.

6.Sensibilizar a jóvenes estudiantes de primaria y secundaria qué impactos reales provoca la caza, intentando crearles una conciencia ambiental sobre la importancia del término ecosistema y su equilibrio.

7.Informar sobre los efectos tan negativos que conllevan el uso de cualquier método no selectivo de captura como cepos, lazos, o cebos envenenados.


PROGRAMA DE LAS JORNADAS

Día: Sábado 5 de marzo

Lugar: Palacio de la Merced de Córdoba (Plaza de Colón, s/n)

De 10:00 a 15:00 y de 16:30 a 22:00 Stands informativos*, paneles y proyección visual (Hall de Salón de actos de Diputación), y exposición fotográfica (Patio Andaluz de Diputación).

De 11:00 a 12:00 Actividades infantiles.

De 12:00 a 12:15 Inauguración oficial del acto.

De 12:15 a 14:30 Mesa redonda “La caza en Andalucía” (Salón de Actos), con representantes de ADENA, ASANDA, Consejería de Medio Ambiente, Ecologistas en Acción, Federación Andaluza de Caza y Plataforma A Desalambrar.

De 17:00 a 18.30 Proyección audiovisual-coloquio: “Impactos sociales y ambientales de las cercas cinegéticas en Andalucía” (Salón de Actos)

De 18:45 a 20:00 Charla-coloquio: “Consecuencias ambientales del uso de métodos no selectivos de captura en la gestión cinegética”, por Joaquín Reina Ortiz, Secretario Estatal de Conservación de la Naturaleza de Ecologistas en Acción (Salón de Actos).

De 20:15 a 21:40 Charla-coloquio: “Impactos sociales y ambientales de la caza”, por Theo Oberhuber, Coordinador Estatal de Ecologistas en Acción (Salón de Actos).

21:45 Clausura y entrega de certificados.

* Puestos Informativos: Almocafre, ASANDA, Ecologistas en Acción de Andalucía, Egmasa, Life Lince/Quebrantahuesos, Plataforma A Desalambrar, SEO.