El apoyo explicito del Delegado de Industria Energía y Medio Ambiente a la Térmica de Barajas de Melo, supone un grave error y contradice el informe de la propia Junta de 2008 que se oponía al proyecto. Además interfiere el procedimiento administrativo, contradice el discurso de la Junta en materia de aguas y energía, se opone e la mayor parte de la población de Barajas de Melo y no se justifica ante la caída de la demanda eléctrica.

La toma de postura de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, por boca del Delegado en Cuenca de la Consejería de Industria Energía y Medio Ambiente, Enrique Hernández Valero, significa una apuesta decidida por las energías más contaminantes no renovables e insostenibles.

Las declaraciones realizadas por Valero la semana pasada en Barajas de Melo en las que manifestó literalmente “Queremos dar nuestro apoyo desde la Junta a este proyecto…” refiriéndose a la térmica de 800 MW a instalar en Barajas de Melo, destapa las verdaderas intenciones de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha con respecto a la política energética y deja en papel mojado su supuesta defensa de las energías renovables y la lucha contra el cambio climático.

De grave error se puede calificar esta toma de postura de la Junta por (entre otras) las siguientes razones:

1. Interfiere en el procedimiento administrativo, puesto que la Consejería de la que es Delegado Hernández Valero, debe pronunciarse sobre la Autorización Ambiental Integrada para este proyecto. Procedimiento comenzado hace año y medio y sobre el que aun no se ha pronunciado.

2. Contradice el informe emitido en febrero de 2007 y firmado por el (por entonces) Director General de Evaluación Ambiental Miguel Chillarón. En ese informe se dice literalmente: «…supondría importantes afecciones negativas desde el punto de vista ambiental y social que hacen que no sea viable ambientalmente.”

3. Contradice la supuesta defensa del Tajo por parte del Junta: La planta de Barajas prevé tomar unos 350 litros por segundo de agua del río Tajo, de los que evaporaría cerca de la mitad devolviendo al cauce el resto del agua sobrecalentada y con un mayor contenido en sales y otras sustancias. El agua evaporada sería aproximadamente igual a la que consumirían 150.000-200.000 personas.

4. La demanda de electricidad en España ha bajado, en lo que va de 2009, un 4,68% con respecto al mismo periodo del año anterior. Además en los últimos 365 días, nuestro país presentó un balance neto exportador de electricidad algo menor del 4% de la demanda, lo que equivale a tener produciendo para la exportación, algo más de dos centrales como la que planea en Barajas de Melo.

5. La firme oposición de la mayor parte de los ciudadanos de Barajas de Melo, que ya lo pusieron de manifiesto con 1.837 alegaciones presentadas, 205 firmas de personas empadronadas solicitando un referéndum y la manifestación de cientos ciudadanos el 11 de octubre de 2008 (entre otras actuaciones).

La central térmica de Barajas (en caso de que se ponga en marcha) tendría una potencia eléctrica de 800 MW, emitiría cada hora casi 300 Tm de dióxido de carbono, principal responsable del calentamiento terrestre. Emitiría también 250 kg por hora de óxidos de nitrógeno (NOx) que a su vez equivale a la emisión diaria de 200.000 automóviles en una ciudad. Los NOx contribuyen a las lluvias ácidas, tienen efectos negativos sobre la vegetación y producen enfermedades respiratorias. Son además precursores del ozono troposférico, otro enérgico contaminante, por su fuerte poder oxidante, con severos efectos sobre la salud y sobre la producción agraria. La contaminación afectaría a otros municipios cercanos de nuestra provincia como Belinchón y Zarza de Tajo y Tarancón.