En las Islas Feroe, Región Autónoma de Dinamarca, su Administración
continúa cometiendo masacres de diferentes especies de delfines, ante un
Gobierno danés pasivo y una Comunidad Internacional que asiste
estupefacta a esta horrible situación.

Prueba de lo anterior son las imágenes que han aparecido recientemente
en diferentes medios de comunicación y que ilustran las consecuencias de
una matanza animal que no tiene ninguna justificación ética ni
ecológica. En esas imágenes se pueden ver con detalle Calderones
comunes, adultos, crías, hembras con sus fetos fuera, completamente
masacradazos.

Los calderones son animales muy sociales, mamíferos marinos que tras un
año de gestación tienen una cría cada 3-6 años. Se ha llegado a eliminar
grupos familiares completos mediante el acoso de varias embarcaciones a
un mismo grupo, arrinconándolos en la playa, en la que mediante un
cuchillo se les corta la médula espinal.

Cada año se cazan, de media, un millar de estos animales, aunque entre
junio y julio ya han sido asesinados más de 600 ejemplares, en las
ciudades de Sandageroi, Klaksvik, Húsavik y Vestmanna. No solo matan
animales de esta especie, sino que también dan muerte a otras especies
de delfines, como el mular y la marsopa.

La irresponsabilidad del Gobierno de las Islas Feroe no queda solo en
que contraviene la normativa internacional y que su actividad no está
regulada por ningún organismo internacional, sino que está perjudicando
seriamente la salud de los ciudadanos, pues diferentes informes han
alertado de la alta toxicidad de la carne y grasa de los Calderones:

- Julio de 2008: Philippe Grandjean, un experto en salud
ambiental de la Escuela Harvard de Salud Pública y la Universidad del
Sur de Dinamarca, alertó sobre el problema de la contaminación con altos
niveles de toxina industrial en la sangre de personas que comen carne
de ballena en las Islas Feroe.

- Noviembre de 2008: Los directores médicos Pál Weihe y Høgni
Debes Joensen, de las Islas Feroe, anunciaron que la carne y la grasa de
ballena piloto contienen demasiado mercurio, PCBs y DDT y no la
consideraban apta para el consumo humano, poniendo de de manifiesto el
daño al desarrollo neuronal del feto, la presión arterial alta, y
alteraciones de la inmunidad en los niños, así como mayores tasas de
enfermedad de Parkinson, problemas circulatorios y, posiblemente, la
infertilidad en los adultos.

Los argumentos sobre las tradiciones históricas, sobre economía, sobre
los métodos de muerte, no son, a juicio de Ecologistas en Acción,
argumentos a tener en cuenta ante la cruel y terrible realidad: el
asesinato de importantes poblaciones de mamíferos marinos, poniendo en
peligro la salud humana y perjudicando la economía de danesa. Por todos
estos motivos, Ecologistas en Acción pide al Gobierno de las Islas
Feroe, al Gobierno de Dinamarca, a la Comisión Europea (islas Feroe
dispone de una oficina de representación en Bruselas, aunque no
pertenece a la Unión Europea) que acabe con estas matanzas e inicie una
nueva política ambiental, de salud y económica en la que saldrá
fortalecida la comunidad feroesa.

Ecologistas en Acción ha enviado escritos al Ministerio de Medio
Ambiente, Medio Rural y Marino de España, a la Unión Europea, al
Gobierno de Dinamarca, al Alto Comisionado y Gobierno de las Islas
Feroe, así como al Presidente de la Comisión Ballenera Internacional,
para que se acabe con las continúas matanzas de calderones y otras
especies de delfines en las Islas Feroe.