Ecologistas en Acción apoya a la Plataforma Ciudadana constituida contra el vertedero industrial de residuos tóxicos y peligrosos que se pretende instalar en Villanueva de la Serena, una preciosa comarca de alto valor ecológico que cuenta con varias Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) en las que viven aves esteparias y águilas imperiales.

Además, la economía de la comarca se sustenta sobre todo en pequeñas y medianas explotaciones agrícolas y ganaderas, que se verían afectadas muy negativamente por el trasiego de camiones cargados con residuos muy peligrosos, como escorias, metales pesados y lodos procedentes entre otros de la metalurgia y de procesos químicos industriales.

Se da la circunstancia que el alcalde tramitó la autorización concedida a esta planta de forma tan discreta y opaca que nadie en el pueblo, ni siquiera sus propios concejales, se enteraron del periodo de exposición pública y por tanto nadie objetó ni se hicieron alegaciones. Esta instalación sería la primera de este tipo en Extremadura (y la cuarta en España) y beneficiaría en primer lugar a las empresas del todopoderoso Grupo Gallardo.

Es inevitable recordar el caso del tristemente famoso vertedero de residuos peligrosos de Nerva (Huelva), que recibe materiales del extranjero y de varias Comunidades Autónomas y que lleva años siendo escenario de incendios provocados por la mezcla de residuos inflamables, nubes tóxicas, vertidos al río y accidentes de camiones con derrame de carga. Este vertedero ha destruido la salud, el entorno natural y la vida social y económica del pueblo de Nerva.

Ecologistas en Acción reitera que un vertedero de residuos peligrosos es consecuencia del fracaso de la gestión ambiental en las instalaciones industriales que, en vez de invertir en reducir y reciclar in situ siguiendo el principio de proximidad, prefieren aprovechar la opción barata de un vertedero. Un incumplimiento flagrante del Convenio de Estocolmo y de los Planes de Acción Medioambiental de la Unión Europea.