Puede ser paradójico que teniendo inversiones ya realizadas en instalaciones solares térmicas de baja temperatura para el ahorro en el agua caliente y la climatización de las piscinas, dichas instalaciones están fuera de uso por estar averiadas.

Los miles de euros que cada mes no ahorra el Consistorio por la quema de gases tóxicos, no beneficia ni al bolsillo, ni a la salud de los vecinos de la Comunidad.

La actual legislación obliga con el nuevo Código Técnico de la Edificación (CTE), a que cualquier edificio, y en más medida aquellos orientados a la salud pública y al deporte, se doten necesariamente de sistemas eficientes y del uso de la energía solar para el abastecimiento del agua caliente en una proporción entre el 60 y 70% de la demanda requerida.

Las instalaciones solares proporcionan gran ahorro en el tiempo por ser muy duraderas, fiables, y de bajo mantenimiento; por lo que no se explica cómo no han resuelto los responsables municipales de éstas instalaciones un problema de fácil y rápida solución.

Los Pabellones deportivos Jesús España, Río Manzanares y piscina Valdesanchuela no pueden presumir de que los paneles solares térmicos instalados en sus tejados mejoren el ahorro, ni la protección al medio ambiente, por lo que sería recomendable y deseable que las autoridades competentes en este asunto realicen la mejora necesaria arreglando las incidencias existentes en dichas instalaciones para ponerlas en marcha lo antes posible, con una apuesta decidida por las energías limpias como es la energía solar y evitando en esa medida el uso masivo de una fuente contaminante y limitada como es el gas.