Ecologistas en Acción y las elecciones del 25 de marzo: Nuestras propuestas para 10 políticas.

Ante la próxima campaña electoral que se va a desarrollar en Andalucía, Ecologistas en Acción hace pública su postura como grupo y sus exigencias a los distintos partidos para incorporar la dimensión ambiental y social.

Ecologistas en Acción, aunque ha renunciado a intervenir directamente en el juego electoral, no es una organización apolítica. El ecologismo social que reivindicamos no es un conjunto de recetas aisladas, sino un movimiento transformador que rechaza el actual modelo neoliberal capitalista y que propone otro alternativo, ecológicamente sostenible y socialmente más justo.

El modelo capitalista identifica crecimiento material con progreso. Así nos encontramos en un escenario de crecimiento material exponencial; planteamos que no se puede mantener indefinidamente el crecimiento material en el seno de un planeta, o en un territorio, con recursos limitados y con una capacidad limitada de asimilar residuos e impactos. Poner límites al crecimiento material es el núcleo de las políticas de verdadera sostenibilidad. Estamos sobrepasando estos límites naturales, con lo que degradamos el medio ambiente y ponemos en riesgo, ya no solo nuestro bienestar, sino nuestra supervivencia. Jugando con las palabras, la política que se aplica en España y Andalucía no es sostenible sino SOStemible.

La angustiosa situación de recesión y paro que padecemos debe constituir un estímulo para un decrecimiento sostenible que ofrezca empleos verdes, compartición de trabajo y protección ambiental: ahí radica la genuina respuesta a la crisis.

Nos preocupa en la política de nuestro país la progresiva desregulación de las actividades económicas: menos planificación, menos Estado y más mercado libre. Las políticas urbanística y energética han generado crecimientos desmesurados, cuyos resultados son despilfarro energético, elevados niveles de contaminación, bloqueo de las energías renovables, especulación inmobiliaria, destrucción de los ecosistemas litorales y vivienda a precios escandalosos.

Proponemos un verdadero ecodesarrollo que permita la conservación de la biodiversidad a todos sus niveles. Los ecosistemas naturales conservan los recursos y mantienen los equilibrios globales. Su preservación es una necesaria garantía de sostenibilidad.

No se entiende el ecologismo sin pacifismo. La permanencia de la base militar de Rota y su elección como escudo antimisiles es inaceptable por los peligros y riesgos que conlleva. Creemos que las relaciones entre las personas y los pueblos tienen que venir marcadas por la paz y el respeto a los derechos y libertades fundamentales. Debemos trabajar por que se pueda cumplir el derecho fundamental de toda persona a moverse libremente de un país a otro.

La democracia en España tiene un importante déficit de participación social y los partidos políticos están cada vez más aislados de una sociedad que desconfía de ellos. Es necesario fomentar una mayor participación ciudadana mediante el libre y fácil acceso a la información ambiental, y la constitución de órganos de control y participación social.

Las propuestas que presentamos a todos los ciudadanos andaluces son:

1.- EN POLÍTICA DE ENERGÍA

Menos CO2 y más renovables.
El objetivo debe ser promover y realizar todas aquellas actuaciones, que contribuyan a evitar un Cambio Climático peligroso (es decir, evitar que la temperatura media global del Planeta aumente más de 2 grados centígrados). Para ello es necesario ir reduciendo las emisiones de CO2 hasta situarlas a mitad de siglo un 80% por debajo de 1990. La solución energética sostenible debe basarse en el ahorro, la eficiencia energética y las energías renovables.

COMPROMISOS QUE PROPONEMOS:

• Establecer objetivos concretos de ahorro energético y producción renovable. En particular, se deben establecer objetivos para:

- Reducir la demanda final de energía en total y en cada uno de los sectores presentes en Andalucía, y específicamente para los edificios y servicios de titularidad pública, mejorando la eficiencia energética y promoviendo programas propios de gestión de la demanda.

- Incrementar la producción con energías renovables en Andalucía, fijando objetivos para cada una de ellas.

• Asegurar el estricto cumplimiento del Código Técnico de la Edificación, en particular en cuanto a las obligaciones de incorporar energía solar térmica y fotovoltaica en los edificios. Se deben tener en cuenta estos requisitos en los planes urbanísticos, asegurando que los edificios se orienten adecuadamente.

• Desarrollar la energía eólica marina en zonas costeras apropiadas, seguir con la promoción de las centrales termosolares con las debidas cautelas en su consumo de agua, construir plantas de biomasa térmica y eléctrica con criterios sostenibles: estas tres son las renovables más importantes para Andalucía.

• Poner fin a las dos carencias más relevantes de la implantación de las energías renovables en Andalucía: la práctica ausencia de industria autóctona ligada a las energías limpias y la participación social en los beneficios económicos que generan.

2.- EN POLÍTICA DE TRANSPORTES

Caminar hacia la movilidad sostenible.
Desde hace tiempo, el transporte motorizado crece sin control. Se trata de un proceso alimentado por el desmesurado crecimiento de las infraestructuras y una política que en general prioriza el transporte privado sobre el público. Sirvan como ejemplo las subvenciones y beneficios fiscales que priman la compra de automóviles y las exenciones fiscales de los carburantes para el transporte aéreo.

Como consecuencia, el transporte es uno de los sectores que más derroche energético producen y el principal emisor de CO2. El transporte y las grandes infraestructuras son, también, parte primordial del actual caos en la ordenación del territorio, y uno de los principales motivos de la pérdida de habitabilidad de nuestras ciudades (contaminación del aire, ruido, falta de espacio,…)

Es necesario replantearse el modelo de transporte, empezando por elaborar y cumplir planes de movilidad sostenible, que reconduzcan este sector por la vía de la sostenibilidad. Para ello, será necesario establecer una moratoria a la construcción y ampliación de autovías, trenes de alta velocidad, puertos y aeropuertos, cancelando todos los proyectos no adjudicados. El siguiente paso sería invertir las prioridades, destinando el grueso del gasto público a la recuperación y mejora de los medios ferroviarios (ferrocarril convencional, metros y tranvías), al transporte público colectivo y a incentivar los medios no motorizados (caminar y bicicleta en las ciudades), sin olvidar las medidas para reducir las necesidades de movilidad.

COMPROMISOS QUE PROPONEMOS:

• Elaborar Planes de Movilidad Sostenible, elaborando y llevando a la práctica planes de fomento de los medios no motorizados (peatonal, ciclista) en zonas urbanas.

• Impedir nuevas urbanizaciones separadas de los cascos urbanos, y romper el círculo vicioso de nuevas urbanizaciones – nuevas autovías. Como requisito previo a todo desarrollo urbanístico debe existir la suficiente red de transporte público como para atender las necesidades de la población.

• Cumplir la normativa de calidad del aire en todas las áreas metropolitanas. Aplicación de medidas de restricción al uso del automóvil en las que se superen los límites legales.

• Modificar la actual tasa intermodal, tanto en el transporte de pasajeros como de mercancías, de tal modo que se invierta la tendencia de un cada vez mayor uso del coche-camión.

3.- EN POLÍTICA DE RESIDUOS

Prevenir sigue siendo el gran reto.
Por más que la prevención aparezca como prioritaria en toda la legislación vigente en materia de residuos, la generación de residuos per cápita no hace sino crecer. Para la próxima legislatura, invertir esta tendencia debe adquirir un carácter de máxima prioridad. La Junta de Andalucía tiene la competencia y la responsabilidad en materia de producción y gestión de residuos.

Hay que empezar por una revisión urgente de los planes andaluces tanto de Residuos Peligrosos como de Residuos no Peligrosos, para que incluyan de forma prioritaria y efectiva la prevención, la reutilización y el reciclado así como el abandono de la incineración como método de gestión de los residuos. Seguir por implementar sistemas eficaces de recogida selectiva de la materia orgánica y de fomentar el compostaje descentralizado, así como garantizar la desaparición de todos los vertederos ilegales.

COMPROMISOS QUE PROPONEMOS:

• Alcanzar para el final de la legislatura al menos un 10% de reducción en peso de los residuos generados.

• Establecer instrumentos y medidas que incentiven la prevención, la reutilización y el reciclado.

• Descartar todo nuevo proyecto de incineración o plasma como sistema de gestión de residuos y planificar la eliminación de la incineración, incluida la utilización de cementeras u otro tipo de instalaciones industriales.

• Cerrar el vertedero de Nerva, que ya ha cumplido su ciclo, y que ha demostrado con creces la incompetencia de sus gestores.

• Desarrollar iniciativas ciudadanas de recogida diferenciada de la basura doméstica, implantando los sistemas de “puerta a puerta”.

• Realizar programas de sensibilización del público acordes con el objetivo de priorizar la prevención, la reutilización y el reciclado.

• Aplicar la revisión de las Autorizaciones Ambientales Integradas al cabo de los 5 años transcurridos para todas las instalaciones de gestión de residuos y anular la autorización en caso de flagrante incumplimiento.

• Aplicación del impuesto sobre vertido en todos los residuos, no sólo los peligrosos, y garantizar sobre todo el correcto compostaje de la fracción orgánica.

4.- EN POLÍTICA DE INDUSTRIA Y CONTAMINACIÓN

Producir con eficacia y sin contaminación.
Los sistemas de producción actuales ni aseguran, ni permiten la protección efectiva de la salud pública y el medio ambiente. Es preciso cambiar los estándares actuales de producción por otros basados en el principio de precaución y en la producción limpia.

Andalucía concentra algunas de las instalaciones industriales más contaminantes del país: los polígonos industriales de Huelva y el Campo de Gibraltar, con serias repercusiones en la calidad del aire y la salud de las poblaciones. La Administración sigue sin dar respuesta satisfactoria al hecho de que el mayor riesgo de mortalidad se concentre en el suroeste de España. La mala calidad del aire está presente en las grandes ciudades como Córdoba y Sevilla, con superaciones de los niveles de partículas, óxidos de nitrógeno, ozono troposférico y monóxido de carbono.

No hay una integración de las políticas de medio ambiente y salud, por lo que muchas enfermedades y muertes que podían ser evitables son el resultado de tener que soportar ambientes insalubres.

Situaciones como la acumulación de 100 millones de toneladas de fosfoyesos radiactivos al lado de Huelva, el constante trasvase (bunkering) de hidrocarburos en la Bahía de Algeciras, la acumulación de balsas mineras tóxicas en Sevilla y Huelva, el vertido al mar sin depuración alguna de ciudades como Algeciras, el incremento de los residuos peligrosos en el vertedero de Nerva (Huelva),… son amenazas para nuestro mermado medio ambiente y para la salud de la población… y bombas de relojería para las generaciones futuras.

COMPROMISOS QUE PROPONEMOS:

• Realizar un inventario completo, de acceso público, de las plantas que están utilizando sustancias químicas peligrosas tanto las incluidas en los textos referidos como otros contaminantes emergentes (COPs, persistentes, bioacumulativas, disruptores endocrinos,…).

• Desarrollar programas de vigilancia sobre contaminación química en medio ambiente, alimentos y personas, creando mapas autonómicos de fuentes, niveles ambientales y exposición a contaminantes.

• Creación de una Agencia de Producción Limpia que fomente, a través de instrumentos económicos y servicios de asesoría a empresas, la utilización sustancias, materiales o procesos sustitutivos para evitar la contaminación y la utilización eficiente de los recursos.

• Estudio epidemiológico riguroso para dilucidar la causa de la mayor prevalencia de cánceres en Sevilla, Huelva, Cádiz, y particularmente en el Campo de Gibraltar y Polo Químico de Huelva.

5.- EN POLÍTICA DE SUELO Y URBANISMO

No especular con el futuro.
El suelo es una parte fundamental de los ecosistemas y el soporte sobre el que se desarrolla la vida terrestre. Sin embargo en la última década hablar de suelo se ha convertido en sinónimo de urbanismo, construcción y, lamentablemente, de destrucción y especulación.

Ecologistas en Acción propone el fomento de un urbanismo respetuoso con la tipología de los pueblos y ciudades andaluzas, con el paisaje y con los recursos naturales, que tenga como objetivo garantizar el derecho constitucional a una vivienda digna a todos los ciudadanos, dotando a los pueblos y ciudades de equipamientos, zonas verdes e infraestructuras de movilidad sostenible.

COMPROMISOS QUE PROPONEMOS:

• Subordinar la actividad urbanística al interés general. Para ello se limitarán los nuevos crecimientos a las necesidades reales de vivienda y de equipamientos públicos. Estos crecimientos se harán siempre en torno a los cascos urbanos.

• No legalización ni regularización de viviendas ni urbanizaciones ilegales que incumplan el texto original del POTA o la LOUA. Demolición de todo lo construido ilegalmente y que no haya prescrito la infracción.

• Prohibir los convenios urbanísticos y la venta de los derechos de edificabilidad de los ayuntamientos, que deben incorporarse a un parque público de viviendas.

• Compromiso político de un pacto anticorrupción, que incluya la destitución inmediata de cualquier cargo electo o de libre designación, que esté imputado, procesado o condenado por la justicia o que esté vinculado a los sectores inmobiliarios o de la construcción.

• Facilitar y promover la participación pública en los procedimientos administrativos. Todo tipo de instrumento de planeamiento, proyectos de construcción, así como de los informes técnicos y jurídicos que los justifiquen deberán ser de acceso público, rápido y gratuito a cualquier interesado. .

• Prohibir expresamente los desarrollos urbanísticos al margen de la ciudad compacta mediterránea, y muy especialmente los ligados a campos de golf y puertos deportivos.

• Iniciar un proceso de desclasificación de suelos declarados urbanizables al calor de la burbuja inmobiliaria y que se encuentran sin desarrollar, con especial urgencia aquellos desligados de la ciudad tradicional y los ligados a campos de golf.

• No recalificar suelos en espacios protegidos o a menos de 500 m del dominio público marítimo terrestre (DPMT).

• Retirar las competencias urbanísticas a aquellos ayuntamientos que incumplen las normas urbanísticas.

6.- EN POLÍTICA DE AGUAS

Conservar los ríos y promover el ahorro de agua. El agua no es un negocio.
Dado que el agua es un elemento vital para las personas, la Unión Europea ha aprobado diversas Directivas para asegurar la depuración de los vertidos urbanos, reducir la contaminación por nitratos, conservar ecosistemas acuáticos y las especies que viven en ellos y, a través de la Directiva Marco del Agua, conservar el buen estado ecológico de las masas de agua y asegurar un buen uso del agua.

Andalucía está lejos de cumplir con muchos de estos objetivos ambientales y ya ha acumulado retrasos no sólo en la aplicación de la Directiva de Saneamiento, sino también de la Directiva Marco de Agua.

Descartar la construcción de embalses y trasvases, cerrar los pozos ilegales, reducir el consumo del agua, restaurar el dominio público hidráulico y depurar los vertidos de todos los núcleos urbanos, son exigencias inexcusables.

El debate entre Junta de Andalucía y Estado sobre las competencias en la gestión del agua ha desviado la atención de los problemas reales que tienen los ecosistemas acuáticos. Ecologistas en Acción considera el debate estatuario infructuoso y, además, contrario a la gestión del agua por cuencas hidrográficas, siguiendo las propias directrices de la DMA. Proponemos, a cambio, reforzar la coordinación interadministrativa y lograr así unas políticas más coherentes y con mejores resultados.

COMPROMISOS QUE PROPONEMOS:

• Fomentar el ahorro de agua en el sector doméstico y en los ayuntamientos a través de la aprobación de ordenanzas autonómicas y municipales para un uso eficiente del agua en las ciudades que abarque todos los edificios, y con unas políticas tarifarias escalonadas.

• Rechazar la creación de nuevos regadíos (incluyendo entre los mismos a los actualmente denominados regadíos infradotados), y reducir la superficie existente en aquellas áreas donde exista un déficit hídrico importante, hasta alcanzar una situación de sostenibilidad y equilibrio con el recurso renovable

• Contaminación, depuración y reciclaje: completar las estaciones depuradoras para todas las poblaciones, asegurar el correcto funcionamiento de las actuales, completar a tratamiento terciario en todas las que se pueda, asegurar la adecuada reutilización de las aguas regeneradas, implantar en las viviendas la separación de las aguas (potables, grises, residuales).

• Favorecer la participación pública en la gestión del agua de los agentes sociales y de defensa del medio ambiente. Democratización en profundidad de los órganos de participación.

• Invertir los procesos de deterioro existentes de las masas de agua subterráneas, lo que sólo podrá lograrse si se adoptan medidas de control de las extracciones no autorizadas. Por ejemplo, el control de vertidos industriales y mineros de Cobre Las Cruces, declarando las masas subterráneas como en Mal Estado Cuantitativo.

• Incorporar el derecho humano al agua de abastecimiento en la legislación como derecho fundamental y que el agua mineral embotellada pase de ser un recurso minero a ser de dominio público hidráulico.

• Plan de detección y clausura de todas las captaciones ilegales y “alegales”, tanto superficiales como subterráneas, estableciéndose un plazo máximo de 5 años para la eliminación de las mismas.

• Cambiar la mala gobernanza del agua. Los mecanismos de la gestión del agua en Andalucía deben cambiar radicalmente, analizando y diseñando nuevas medidas que permitan un cambio en la gestión del recurso, evitando la expansión futura del regadío entre otros aspectos. La política de aguas tendrá que ir de la mano de la Directiva Marco de Aguas.

• Mantenimiento del principio de unidad de cuenca como unidad de gestión. Aplicación rigurosa de la DMA, que nos brinda la oportunidad de planificar y gestionar las aguas de forma integrada e integradora

• Recuperación de costes para todos los usuarios del agua, incluyendo también un canon para los sectores productivos, como así lo establece la DMA.

• Obligatoriedad de la tarificación volumétrica en el consumo de agua para la agricultura.

• Exigir una gestión pública para los abastecimientos urbanos. El agua no es un negocio.

7.- EN POLÍTICA DE AGRICULTURA, DESARROLLO RURAL Y BOSQUES

Impulsar una agricultura saludable y beneficiosa para el medio ambiente.
Al descansar directamente sobre la explotación de los recursos naturales, la agricultura y la ganadería son sectores con un gran impacto potencial sobre el medio ambiente. De hecho, la contaminación y sobreexplotación del agua, la erosión y desertificación de los suelos y la desaparición de la biodiversidad en los sistemas agrarios, pueden ser algunos de sus efectos.

Existe una clara demanda ciudadana por una mayor calidad y seguridad alimentaria, libre de los riesgos introducidos por los organismos genéticamente modificados (OGM) u otras prácticas agrarias intensivas, y mejores garantías de bienestar animal, así como un reconocimiento social creciente hacia el papel de las prácticas agrícolas y ganaderas extensivas tradicionales como mantenedoras del paisaje y la biodiversidad de buena parte de la Red Natura 2000 española. Todo ello implica una reforma sustancial de las políticas agrarias en Andalucía, eliminando las subvenciones perversas (contrarias a la conservación del medio ambiente) y primando las prácticas beneficiosas para el medio ambiente mediante la aplicación de medidas agroambientales y de desarrollo rural.

COMPROMISOS QUE PROPONEMOS:

• Establecer planes de reducción del uso de productos químicos en la agricultura con objetivos temporales y cuantitativos diferenciados para cada tipo de fertilizante y fitosanitario, e imponerles un gravamen ecológico siguiendo el principio de que quien contamina paga.

• Favorecer de manera activa a la agricultura y la ganadería libre de químicos de síntesis, y en particular a la producción ecológica.

• Denegar y erradicar el cultivo de variedades modificadas genéticamente, declarando su territorio “libre de transgénicos”.

• Detener inmediatamente las nuevas transformaciones en regadío y realizar una evaluación de coste-beneficio de las zonas actualmente en explotación que muestran claros signos de insostenibilidad (social, económica o ambiental), para estudiar en los casos más graves su posible reconversión.

• Elaborar programas de desarrollo rural, destinado a la conservación del medio ambiente y cuenten con ambiciosas medidas agroambientales de protección y mejora de los suelos, los acuíferos y la biodiversidad. Especialmente, se deben establecer medidas concretas de protección y fomento de las variedades y razas autóctonas, así como para los modelos de agricultura y ganadería tradicional extensiva (cultivo de secano tradicional, ganadería de montaña, mantenimiento de dehesas,…).

• Evaluar cuidadosamente la implantación de los cultivos agroenergéticos para la producción de biocombustibles, dado que, aunque pueden llegar a ser un elemento importante en la lucha contra el Cambio Climático, también pueden tener un gran impacto sobre la biodiversidad y el resto del sector agrario y forestal.

Aplicar una gestión sostenible a nuestros bosques.
Los incendios forestales, la gestión forestal, los procesos erosivos y el consumo de productos forestales constituyen hoy día los cuatro indicadores clave de la política forestal en todo el territorio español.

COMPROMISOS QUE PROPONEMOS:

• Desarrollar y aplicar planes comarcales efectivos de lucha contra los incendios forestales basados en la investigación de las causas sociales y naturales del fuego..

• Ejecutar planes de restauración de los ecosistemas forestales de Andalucía y recuperar su diversidad biológica garantizando su gestión y conservación futura.

• Fomentar la certificación forestal FSC para asegurar los valores sociales y ambientales de los montes a la vez que se ofrece un valor añadido a sus productos

• Impedir la sustitución del monte mediterráneo por siembras intensivas de eucaliptos.

• Mantener el monte público, y contra su «permitida degradación» para, así, favorecer más tarde su conversión en suelo urbano o agrícola.

8.- EN POLÍTICA DE MARES Y COSTAS

Proteger la costa y el medio marino.
El litoral andaluz se enfrenta a graves problemas: una urbanización depredadora y salpicada de especulación y corrupción, un desarrollo turístico mal planificado y con un horizonte infinito de ocupación, graves problemas de erosión costera a los que no se pone solución, una planificación de las vías de transporte basado en la expansión ilimitada, la destrucción de espacios costeros protegidos y los graves problemas de contaminación debidos a la escasa depuración de las aguas residuales, tanto industriales como urbanas.

Por otro lado, cada año se agotan nuevas pesquerías y a pocas se les da oportunidad para recuperarse. La anchoa, el atún rojo, la cigala son sólo algunos ejemplos de especies que estamos perdiendo. El 81% de los caladeros europeos están sobreexplotadas. Las administraciones pesqueras, con frecuencia, ignoran los consejos científicos y priman los intereses políticos y productivitas a corto plazo frente a la gestión pesquera sostenible.

Además la sobreexplotación de los recursos costeros, los motores ilegales, las artes poco selectivas y dañinas, las capturas accidentales de especies amenazadas, el furtivismo o la falta de reservas de pesca son algunos de los problemas que Andalucía puede y debe resolver.

COMPROMISOS QUE PROPONEMOS:

• Mantener la Ley de Costas en su estado actual, derivada de la Constitución de 1978

• Moratoria a los nuevos proyectos de construcción de puertos deportivos

• Destinar parte del Fondo Europeo de Pesca (FEP) a la creación y gestión de reservas pesqueras, protección de hábitats sensibles (praderas de fanerógamas, coralígenos, mäerl) y medidas que faciliten la puesta en marcha de la parte marina de Red Natura 2000.

• Planificar un desarrollo acuícola con criterios ambientales estrictos, aplicando el criterio de precaución, con respeto a los espacios naturales y los ecosistemas sensibles; primando especies con un menor impacto ambiental, minimizando la contaminación generada, etc.

9.- POLÍTICA DE CONSERVACIÓN

Conservar la biodiversidad.
Andalucía sufre un proceso rápido de pérdida de diversidad biológica, en gran medida debido a la extracción y consumo de recursos naturales por encima de su tasa de renovación natural y a políticas económicas y sociales incompatibles con la conservación de la biodiversidad.

Entre otros factores, hemos asistido a la construcción de grandes infraestructuras, a la multiplicación de los desarrollos urbanísticos y a un constante crecimiento de la actividad socioeconómica que ha pesado gravemente sobre los recursos, espacios y especies naturales.

COMPROMISOS PROPUESTOS:

• Finalizar el proceso de designación de espacios de la red Natura 2000, designar todas las Zonas de Especial Conservación (ZEC) y aprobar los correspondientes planes de gestión de todos los espacios de la red Natura 2000.

• Aprobar y poner en práctica los planes de recuperación de todas las especies en peligro de extinción, incluidas en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas. Actualizar el catálogo andaluz de especies amenazadas con el resultado de los últimos libros rojos publicados y la información científica más reciente.

• Elaborar y poner en práctica un plan de lucha contra el veneno y de modificación de tendidos eléctricos peligrosos para la avifauna.

• Asegurar que las normas autonómicas cumplan estrictamente la normativa comunitaria en materia cinegética.

• Elaborar y aprobar una Estrategia de Control y Erradicación de especies introducidas invasoras que incluya una lista abierta de las especies presentes y su respectivo plan de control. Prohibir el comercio y posesión de las especies incluidas en la lista.

• Evaluar el estado de conservación de los hábitats de interés comunitario de Andalucía e iniciar un programa de restauración de aquellos hábitats en peor estado de conservación.

10.- EN POLÍTICAS DE PACIFISMO, SOLIDARIDAD Y ANTIGLOBALIZACIÓN

No queremos ser la comunidad más militarizada de España. No al “escudo antimisiles” en Rota.

COMPROMISOS QUE PROPONEMOS:

• Exigir la desnuclearización militar de Andalucía, es decir, el no tránsito de naves de propulsión o con armamento nuclear a bordo; así como la descontaminación radiactiva de la zona de Palomares, problema derivado de la caída de varias bombas atómicas sobre esa zona en 17 de enero de 1966.

• Exigir a la Junta de Andalucía una condena clara y firme respecto a la instalación del “escudo antimisiles” en Rota

• Exigir al Mº de Defensa que no especule con sus propiedades en suelo andaluz y la desmilitarización del territorio, de zonas y edificios como la sierra de Córdoba (instalaciones de Cerro Muriano), Brigada de la Legión en la sierra de Ronda y Almería, Base Aérea Militar de Armilla (junto a la ciudad de Granada), Mando de Adiestramiento y Doctrina (inmuebles en la ciudad de Granada), instalaciones militarmente inútiles en Sevilla (como el edificio de la Capitanía General), desmilitarización de la costa gaditana (radares, grandes acuartelamientos, baterías de misiles en Tarifa, campos de maniobra, etc.)

• Exigir recortes en gastos militares y no en gastos de cooperación internacional.

• Proponer un fuerte relanzamiento de la Educación para la Paz y la Interculturalidad en Andalucía cuyo fundamento sea la No violencia y sus objetivos los de fomentar una globalización justa, respetuosa con el Medio Ambiente y con los Derechos Humanos.

• Exigir el cierre de los Centros de Internamiento de los Emigrantes (CIEs) de Capuchinos (Málaga) y de La Piñera (Algeciras).

• Defender que el caladero saharaui es de los saharauis y los caladeros de Somalia de los somalíes.