Los colectivos ecologistas Asociación para la Recuperación del Bosque Autóctono (ARBA), Asociación Ecologista del Jarama “El Soto”, Ecologistas en Acción, Grupo de Acción para el Medio Ambiente (GRAMA) y Jarama Vivo alertan, un año más, del descontrol en la gestión de los caudales de riego derivados del río Jarama y los problemas de contaminación de sus aguas.

Con el comienzo de la temporada de riegos agrícolas en la vega del río Jarama se han producido los primeros conflictos por el agua. Los regantes situados aguas abajo, en Toledo, se quejan de que nos le llega agua para el riego. Mientras, aguas arriba en Madrid, se despilfarra este recurso. Este descontrol en la gestión del agua también repercute sobre el río que prácticamente queda seco durante los meses de verano. A esta situación hay que añadir el problema del elevado nivel de contaminación de las aguas del río al recibir los vertidos residuales de buena parte de la población madrileña. El nuevo Plan Hidrológico que se tramita en la actualidad prevé prolongar esta situación indefinidamente.

Agricultores de Boróx, Ciempozuelos y Seseña, en Toledo, están denunciando ante la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) que no les llega agua para el riego. Al mismo tiempo las parcelas de San Martín de la Vega y norte de Ciempozuelos, en Madrid, aparecen todos los años prácticamente inundadas y el río Jarama sometido a situaciones extremas de desecación. Todo esto sucede a pesar de que desde hace años la CHT deriva para el riego del ámbito del Canal del Jarama un volumen de agua superior al asignado legalmente en el Plan Hidrológico del Tajo. En 2012 derivó 172,63 hm3, mientras que el máximo establecido es de 104,76 hm3/año. Situaciones similares se han sucedido en años anteriores

El descontrol y el abuso crece cada año, mientras el río Jarama agoniza y los campos agrícolas de la zona de San Martín de la Vega parecen
arrozales.

Al problema de la inadecuada gestión de los volúmenes de agua hay que sumar la contaminación de las aguas que se usan para el riego. El Canal del Jarama parte de la Presa del Rey (Rivas- Vaciamadrid) y riega 10.800 hectáreas de los municipios de San Martín de la Vega, Valdemoro, Ciempozuelos, Aranjuez, etc., y algunas
localidades de Toledo. La Presa del Rey se encuentra en la confluencia de los ríos Jarama y Manzanares. Dos de los ríos más contaminados del Estado. Numerosos informes y los propios controles de calidad de la CHT confirman la alta contaminación de esas aguas, hasta el punto de que el actual Plan Hidrológico las
considera “no aptas para ningún uso”, a pesar de lo cual siguen empleándose para el riego de productos agrícolas de consumo, incluso mediante riegos por aspersión que dispersan las partículas tóxicas a gran distancia.

La suma de estas problemáticas (incumplimiento de los volúmenes máximos de agua del río derivados para el riego agrícola, desecación crónica que soporta el río Jarama en los meses de estío, contaminación de las aguas) suponen un grave problema ambiental y sanitario que ninguna administración quiere atajar a pesar de las denuncias que reciben. Los colectivos ecologistas Asociación para la Recuperación del Bosque Autóctono (ARBA), Asociación Ecologista del Jarama “El Soto”, Ecologistas en Acción, Grupo de Acción para el Medio Ambiente (GRAMA) y Jarama Vivo exigimos que se ponga fin a esta situación y se aborde definitivamente el tratamiento de las aguas residuales que llegan a los ríos madrileños y se impida el empleo de estas aguas en el riego agrícola.