El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) admite a trámite un recurso contencioso, interpuesto conjuntamente por Ecologistas en Acción y Esquerra Unida de Alicante, contra la concesión a Inusa de la autorización ambiental integrada para el vertedero de Fontcalent.

El grupo municipal de Esquerra Unida de Alicante y Ecologistas en Acción del País Valenciano interpusieron en diciembre de 2013 un recurso en el TSJ contra la concesión a la mercantil INUSA, participada por el empresario Enrique Ortiz, de la AAI a la planta de tratamiento de RSU y vertedero en Fontcalent (Alicante) en marzo de 2012. Esa concesión fue recurrida en alzada ante el Secretario Autonómico de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente en mayo de 2013 y desestimado el recurso en octubre de 2013.

La nueva AAI autoriza la ampliación del vertedero en casi un 50% de su capacidad (pasa de 3,15 a 4,64 millones de toneladas) mediante la construcción de una quinta celda de vertido, aumento de capacidad que no es necesaria teniendo en cuenta las necesidades del municipio de Alicante, pero que se oferta alegremente a otros municipios y planes zonales (municipios del sur de la provincia de Valencia, municipios de la Vega Baja), en aras de una supuesta “solidaridad” pero en realidad para hacer un nefasto “negocio” que supone un ingreso de varios millones de euros, a costa de la salud y el bienestar de los residentes próximos al vertedero y pasando por alto los graves impactos ambientales que supone un macrovertedero de tal calibre que genera malos olores, lixiviados, posible contaminación de los acuíferos, emisión de gases peligrosos y degradación del paisaje, y que habrá que controlar ambientalmente durante 30 años tras su clausura.

La planta de tratamiento de RSU, a pesar de su corta antigüedad (fue inaugurada en 2005) es muy ineficiente ya que recupera una ínfima proporción de los residuos entrantes, 2,9% entre materiales y compost (cuándo los RSU no se derivan directamente al vertedero) y vertió en 2011 el 78% de los residuos que entraron en la planta, muy por encima del 44% establecido en el Plan Zonal.

La concesión de la AAI ha estado rodeada de graves incumplimientos de la normativa vigente, como la inexistencia de un Estudio de Integración Paisajística previo a esa concesión, el desprecio por la Ordenanza Municipal de ruido del Ayuntamiento de Alicante, ya que supera sus valores límite en el entorno de la planta, o la mala gestión de las instalaciones, repetidamente denunciada ante el Seprona y la misma Conselleria, como el vertido de residuos sin recibir ningún tratamiento previo, la rápida colmatación de los diferentes vasos de vertido o el llenado de las balsas de lixiviados por encima del 50% de su capacidad, que pone en riesgo de contaminación el dominio público hidráulico ante un episodio de fuertes lluvias y el desbordamiento de las mismas.

El recurso contencioso administrativo cuenta con el apoyo económico y social de diferentes colectivos ciudadanos o sociales como la Asociación de Vecinos “Amigos de Fontcalent” del Rebolledo, Salvem Fontcalent, la Coordinadora de Asociaciones y Colectivos de las Partidas Rurales de Alicante y la Federación Local del sindicato C.G.T.