JPEG - 34.2 KB
Seco a pocos metros del mar.

Denunciamos que el río Guadalfeo lleva varias semanas completamente seco en su desembocadura.

La Ley exige que haya caudales ambientales que permitan como mínimo la vida piscícola.

Hay especies protegidas que sufren esta negligencia por parte de la administración, como el galápago leproso, protegido por varios convenios internacionales y directivas europeas ( Convenio de Berna Anexo III, Directiva de Hábitats Anexo II y Anexo IV) y la anguila, a la cual ampara, el Decreto 396/2010, de 2 de noviembre, por el que se establecen medidas para la recuperación de la anguila europea (Anguilla anguilla).

Lo más sangrante es que hay un Plan de Gestión de la Anguila en Andalucía, que está costando un dinero y que pretende facilitar en los ríos andaluces la vida de esta especie en peligro crítico.

La situación en el Guadalfeo es fácil de resolver, sólo hay que dejar que llegue agua al mar, que no es un desperdicio, y no se puede alegar la falta de agua con el esplendoroso embalse de Rules aguas arriba.

El secar un río es un delito ecológico contemplado en el código penal, aunque nuestros fiscales todavía no se han enterado, y los responsables de mantener el buen estado de nuestros ríos son funcionarios de la administración que cobran por hacer bien su trabajo.

Hemos denunciado ante la Consejería de Medio Ambiente esta situación y le exigimos que ponga remedio inmediatamente en aplicación de la normativa vigente.