Está cortando dos vías pecuarias, la vereda de las Cuadrillas y la vereda de Cordobilla con malla cinegética, ocupando los descansaderos de la Fuente de la Higuera y de la Fuente de la Adelfa, lo que supone una infracción muy grave según la Ley de vías Pecuarias.

Se ha montado unos lugares de alojamiento que no se han legalizado en turismo. Concretamente el Decreto 164/2003, de 17 de junio, de Ordenación de los Campamentos de Turismo dice que no se “No podrán establecerse campamentos de turismo en … aquellos lugares que, por exigencia del interés público, estén afectados por prohibiciones, limitaciones o servidumbres públicas establecidas expresamente mediante disposiciones legales o reglamentarias”. El mismo decreto en su Art.35.4 dice textualmente: “No podrá procederse a la apertura del establecimiento en tanto no le sea notificada la resolución de inscripción definitiva en el Registro de Turismo de Andalucía” Un Ayuntamiento que pretende ser referente turístico no debe dar este ejemplo.

No tiene legalizado aún el Parque Zoológico, pero sigue incorporando especies nuevas a pesar de no estar autorizado por la ley. Hay especies peligrosas y no se ve personal de vigilancia como exige la legislación vigente y las escapadas de especies silvestres no autóctonas al medio natural ya se han producido, lo que supone otra violación flagrante de la normativa ambiental. Por eso denunciamos que este recinto zoológico no cumple con la Ley 31/2003, de 27 de octubre, de conservación de la fauna silvestre en los parques zoológicos.

El Art. 3 de la citada Ley dice que “Los parques zoológicos quedan obligados al cumplimiento de las medidas de bienestar de los animales en cautividad, profilácticas y ambientales indicadas a continuación: b) Proporcionar a cada una de las especies un enriquecimiento ambiental de sus instalaciones y recintos, … d) Evitar la huida de los animales del parque zoológico, en particular de aquellas especies potencialmente invasoras,…”

Estas obligaciones exigidas por la ley no se cumplen, pues los habitáculos donde se encuentran albergados los animales no son los más adecuados y además no cumplen con las condiciones de seguridad exigidas, ya que se han escapado ejemplares de muflón que campan a sus anchas por el Parque Natural de la Sierra de la Almijara. Este hecho constituye una infracción muy grave recogida en el art. 13.4 b) “La liberación no autorizada, negligente o intencionada, de animales del parque zoológico pertenecientes a especies potencialmente invasoras.” Este hecho también está tipificado como falta muy grave en la Ley 8/2003, de 28 de octubre, de la Flora y la Fauna Silvestres, en su Art. 75 : “La introducción de ejemplares de fauna silvestre alóctona, híbrida o manipulada genéticamente sin autorización” También, en los últimos meses ha habido ampliaciones de este “Parque” con la adquisición de dos hipopótamos, cuatro osos y cinco papiones, constituyendo otra infracción muy grave según la Ley 31/2003 Art. 13.4 “a) La apertura al público, la modificación sustancial o la ampliación del parque zoológico sin la autorización del correspondiente órgano competente.”

Hemos observado la absoluta falta de vigilancia en las instalaciones, donde una persona puede deambular por donde quiera y acercarse a todas las especies separadas por unas, a nuestro juicio, insuficientes medidas de protección. Y dado que en la disposición adicional primera se contempla “2. En el caso de animales especialmente peligrosos, se deberá contar con un sistema de control permanente, a cargo del personal especializado del parque zoológico. En todo caso, deberá informarse al público de dicha circunstancia por medio de indicadores visibles”, podemos asegurar que sólo avisa de la peligrosidad de los animales, pero no vemos personal especializado por allí.

También se comenta que existe en el lugar un “Centro de Investigación Experimental” del que no se sabe nada, ni creemos que esté reconocido oficialmente por la Administración Competente. Por todo lo expuesto consideramos que la existencia de este “Parque Zoológico” es un peligro para el medio ambiente -ya demostrado por las fugas de especies alóctonas- y para la seguridad de las personas.

Por todo ello Ecologistas en Acción ha denunciado estos hechos a las autoridades competentes y ha solicitado que se quite la malla cinegética y se libere el paso por las vías pecuarias, que se cierre el campamento de turismo si es ilegal, pues supone una competencia desleal con otras instalaciones que sí están legalizadas y que se cierre provisionalmente el Parque Zoológico hasta que no esté legalizado (Art. 12 de la Ley 31/2003) y hacemos corresponsable a la Delegación Provincial de Medio Ambiente de los daños que al medio ambiente o a las personas pudieran ocurrir por estar funcionando estas instalaciones.