De un tiempo a esta parte, en el caso urbano de Huesca, hemos podido comprobar que bajo criterios técnicos de dudoso rigor, varios árboles de plazas y calles que poseían un tamaño más que considerable han sido talados de la noche a la mañana…

Salta a la vista hasta al paseante más despistado, cómo el arbolado urbano de esta ciudad de Huesca sufre una mengua atroz, o es candidato a ser talado ante las prácticas arboricidas del Ayuntamiento, amparados según fuentes oficiales, por supuestos criterios técnicos o por reestructuración paisajística del entorno.

Y es que parece ser, que aun con los innumerables manuales pedagógicos ambientales existentes, que aportan gran respaldo fundado y comprobado de la gran cantidad de aportes en positivo que la presencia forestal vuelca en las ciudades, algunos técnicos o políticos actuales no terminan nunca de comprender, que esos seres que de pie se encuentran en las calles, son esenciales para la supervivencia de nuestra especie humana.

Los árboles por muy grandes o muy pequeños que sean albergan dignidad en ellos, son herencia y testigo vivo de la historia de una ciudad y referentes culturales en muchas ocasiones.

De un tiempo a esta parte hemos podido comprobar que bajo criterios técnicos de dudoso rigor, varios árboles de plazas y calles que poseían un tamaño más que considerable han sido talados de la noche a la mañana… Claros ejemplos de ello son los álamos que se encontraban en la plaza Unidad Nacional, pinos de la escuela de idiomas, o el chopo de la calle Aragón frente al Centro Cívico del Barrio del Perpetuo Socorro, entre otros….

¿Cómo hacer entender a los responsables en estas áreas que la solución arbórea no siempre pasa por cortar de base?, ¿Es posible que nadie se haya planteado seriamente realizar buenas planificaciones a la hora de implantar árboles y/o abordar exhaustivos mantenimientos de ejemplares deteriorados para que su deterioro no sea letal?, ¿Por qué y bajo qué criterios ambientales la reestructuración paisajística de una zona tiene que soportar numerosas talas de árboles (como hemos podido comprobar sobradamente en varias zonas de Huesca) cuando éstos, ya presentes, podrían ser introducidos en el proyecto?, ¿De verdad que la solución se encuentra siempre en sustituir árboles añejos que no han sido debidamente mantenidos, por árboles de naturaleza enana o de crecimiento lento que aportan flor, y cuyas raíces no presentan a la larga demasiadas molestias?.

Nadie desea que la ciudad se convierta poco a poco en un área de árboles bonsáis , ni tampoco que las raíces de un árbol fuerte levante pavimentos y destruya aceras en las calles, pero sí se desea y se pide una mejor planificación para que eso no suceda, o una readaptación del pavimento a la existencia del mismo cuando las condiciones lo permitan.

Desde Ecologistas en Acción de Huesca, continuaremos luchando por una defensa activa de las políticas urbanísticas de respeto y dignificación del arbolado de nuestra ciudad, y exigimos una vez más al Ayuntamiento de Huesca, mejor información y mayor participación ciudadana al respecto.