“Ecologistas en Acción denuncia nuevas desecaciones realizadas dentro del área protegida de la Marjal o Prat de Peñíscola (Castellón), para instaurar cultivos hortícolas (en este caso, tomateras). Recordemos que este humedal está protegido por el Inventario Nacional de Humedales y el Catálogo de Zonas Húmedas de la Comunidad Valenciana; está declarado como Lugar de Importancia Comunitaria-LIC dentro de la Red Natura 2000 de la UE; posee planes de gestión y recuperación de especies en peligro de extinción (fartet y samaruc), etc., aunque, desgraciadamente y en pleno siglo XXI, sigue siendo agredido, desecado y alterado, siendo sus medidas de vigilancia, control y conservación claramente ineficaces”.

Si ya en enero de 2015, la marjal de Peñíscola, fue objeto de brutales e innecesarias cortas de cañares, carrizos y vegetación alrededor de las principales acequias (Sangonera y Templera), acequias de la vía pecuaria del Assagador de la Creu y zonas vegetadas junto a la pasarela de madera de la zona sur, fulminando apantallamientos vegetales y acústicos, zonas de refugio para la biodiversidad y fomentando los impactos por vertidos, depredadores domésticos, presión humana, ruidos, etc., ahora se descubren graves desecaciones en la zona oeste y en pleno corazón de la zona húmeda, afectando a zonas de alto valor ecológico.

Se han arrasado, ilegalmente, más de 1.500 m2 de suelo protegido, siendo sustituidos sus carrizos y ullals (hábitat de especies protegidas y en peligro de extinción) por cultivos hortícolas (en este caso tomateras) regados mediante sistemas de goteo.

Estas roturaciones son un auténtico delito ecológico ya que se ha transformado un área protegida reconocida y delimitada por la Red Natura 2000 e Inventarios Nacionales y Autonómicos de zonas húmedas. Además tiene planes de acción sobre especies en peligro de extinción (peces ciprinodóntidos, como el fartet (Aphanius iberus) y el samaruc (Valencia hispanica) y se han destruido hábitats prioritarios [Áreas pantanosas calcáreas: Turberas calcáreas con Cladium mariscus y con especies del Caricion davallianae. (Código 7210)]. También se ha afectado a especies prioritarias y protegidas, amparadas por la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad y por la Directiva de Hábitats 92/43/CEE del Consejo, de 21 de mayo de 1992, relativa a la conservación de los hábitats naturales y de la fauna y flora silvestres.

Se ha alterado el hábitat y afectado a especies presentes en la zona, de las cuales cuatro especies son consideradas, por la normativa vigente, como en peligro de extinción [dos peces: Fartet (Aphanius iberus), Samaruc (Valencia hispanica) y dos aves: Aguilucho lagunero occidental (Circus aeruginosus) y Escribano palustre (Emberiza shoeniclus w.)]; tres especies son consideradas como vulnerables [un reptil: Galápago europeo (Emys orbicularis) y dos aves: Garza imperial (Ardea purpurea) y Garcilla cangrejera (Ardeola ralloides)] y se dañado a numerosas especies de plantas, invertebrados, peces, anfibios, reptiles, aves y mamíferos considerados en régimen de protección especial y protegidos por la actual normativa internacional, nacional y autonómica.

Parece mentira que con toda la información de que se dispone sobre los humedales y su reconocida importancia biológica, hídrica, ambiental, cultural, etc., en pleno siglo XXI, se continúe desecando estos importantes lugares. Es preocupante que no se haga cumplir la ley, que las medidas de protección de este espacio natural no sean eficaces y que tanto el Ayuntamiento de Peñíscola como la Consellería de Medio Ambiente no hayan sido capaces de paralizar estas actuaciones y encontrar a sus responsables.

Ecologistas en Acción ha denunciado estos hechos ante las administraciones públicas competentes (Consellería de Medio Ambiente, SEPRONA, Fiscalía y Ayuntamiento de Peñíscola), para que se inicien las medidas legales necesarias para localizar a los agresores, así como para que se restaure la zona dañada y se tomen serias medidas de vigilancia y conservación para este valioso humedal protegido.