El martes 28 de abril a las 19,30 h. la alcaldesa de Grazalema ha convocado un Pleno, que será el último de su carrera política, en el que ha incluido la modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para eliminar la obligatoriedad de mantener en todas las construcciones la tipología tradicional de los pueblos blancos. La modificación afecta al polígono industrial que se está construyendo a la entrada del pueblo. Este cambio en el PGOU se ha tramitado con ocultación y engaño, pues el título de la modificación es “Reducción del sector I-1”. La alcaldesa aseguró en el Pleno que aprobó inicialmente esta modificación que era un mero cambio de límites del polígono industrial para adaptarlo a una vía pecuaria. Mintió.

La modificación incluye la eliminación de todas la normas que obligan a que estas naves industriales respeten la tipología tradicional que ha hecho famoso a este pueblo a nivel nacional e internacional. Se intenta así dinamitar con alevosía y premeditación este modelo de población histórica perfectamente integrada en el territorio, y se hace exclusivamente por los problemas legales que está teniendo la señora alcaldesa y los técnicos de Diputación que han redactado el proyecto de polígono industrial, que se ha demostrado manifiestamente ilegal.

Como ejemplo de las modificaciones que se pretenden incluir en el PGOU baste destacar que las fachadas pasarían de tener “revestimientos lisos y acabados en color blanco, prohibiéndose expresamente los materiales cerámicos vidriados, plásticos, fibrocemento, revestimientos metálicos, acabados en pizarra y similares”, a permitirse “revestimiento de piedra de laja… en planta alta se permiten celosías de lama horizontales o verticales de madera o metálicas, pintadas en color marrón, exteriores a la fachada hasta una distancia de 15 cm…”. Las cubiertas pasarán de ser obligatoriamente de teja árabe a dos aguas, a ser “transitables y ajardinadas” (¿). Se modifica la altura de las naves, que pasa de los 6,50 m. a los 9 m, aumentando su impacto paisajístico. Se pretende permitir lo que ahora está prohibido, recogiendo literalmente lo que ya se ha construido de forma ilegal en el polígono industrial, con un enorme impacto estético y paisajístico en pleno Parque Natural de la Sierra de Grazalema, dinamitando el enorme esfuerzo normativo, político y social de mantener una tipología tradicional famosa a nivel nacional e internacional.

Hay que recordar que Ecologistas en Acción denunció la construcción de este polígono industrial hace más de tres años, cuando comenzó su construcción, precisamente por incumplir las normas del PGOU, así como el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) y el Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del Parque Natural Sierra de Grazalema. La Declaración de Impacto Ambiental de este PGOU incluía como condición vinculante que se respetara la tipología tradicional en el polígono industrial. La alcaldesa nunca contestó a las denuncias, y tanto los servicios técnicos de la Diputación como los responsables de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio (CMAOT) apoyaron la construcción de unos edificios ilegales que dañan gravemente el paisaje urbano de Grazalema.

Ecologistas en Acción presentó denuncia ante la Fiscalía de Cádiz al poderse estar cometiendo delitos sobre la ordenación del territorio, contra los recursos naturales y el medio ambiente y de prevaricación. La Fiscalía de Cádiz, remitió dicha denuncia al Juzgado de Ubrique “al evidenciarse hechos que podrían tener significación penal”. La denuncia va dirigida contra Mª José Lara Mateos, alcaldesa de Grazalema, contra Silvia López Gallardo, ex delegada de la Consejería de Medio Ambiente, y contra los técnicos del Servicio de Asesoramiento a Municipios (SAM) de la Diputación Provincial.

Ante la actuación de la Fiscalía, el Director General de Urbanismo de la Junta remitió hace un año una Resolución a la alcaldesa de Grazalema en la que “se insta a la revisión de oficio del acuerdo del Pleno de 1 de diciembre de 2010 por el que se aprobó definitivamente el Estudio de Detalle del Parque Industrial, afectado de nulidad”. En dicha Resolución se deja patente la ilegalidad del polígono industrial, tal y como viene denunciando Ecologistas en Acción desde que se iniciaron las obra. La alcaldesa de Grazalema, en vez de cumplir con este requerimiento, lo que está haciendo es modificar el PGOU para intentar blindarse ante un previsible imputación por estos hechos.

Ecologistas en Acción advierte de la gravedad de esta propuesta de modificación del PGOU, que esperemos rechace el Pleno municipal, pues crearía un peligroso precedente para que en otras edificaciones se elimine también esta obligación legal de mantener la tipología que ha hecho famoso a este pueblo.

Ecologistas en Acción lamenta el silencio cómplice de la Junta de Andalucía y del PSOE provincial ante esta barrabasada de una alcaldesa socialista que antepone sus intereses personales a la defensa de los intereses de este pueblo, emblema de los pueblos blancos de la sierra de Cádiz.