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Delichon urbicum

Cada año, en primavera, cientos de aves migratorias surcan nuestro espacio aéreo para realizar sus ciclos vitales en muchos ambientes y hábitats comarcales. Uno de ellos son las zonas urbanas (ciudades, pueblos y zonas urbanizadas), donde, en época primaveral y estival, algunas especies se han adaptado a estas zonas humanizadas y utilizan huecos, fachadas, quicios, persianas, edicifios en construcción o rehabilitación, etc., para realizar sus nidos y traer al mundo a sus polladas. Sí, nos referimos a esas especies insectívoras que alegran nuestras calles con sus cantos y gritos, y como no, nos libran de millones de insectos (moscas, mosquitos, hormigas aladas, escarabajos, cucarachas, etc.) en muchos casos muy molestos. Especies y sus nidos, que por su acción beneficiosa, están protegidos por la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad y catalogados dentro del “Régimen de Protección Especial”.

La ciudad de Vinaròs y sus zonas periurbanas también se benefician de la presencia de estas especies estivales, donde vencejos o falciots (Apus apus), aviones comunes u oronetes de cuablanca (Delichon urbicum) y golondrinas o oronetes (Hirundo rustica) son las especies más comunes y crean nidos por doquier. Su población fluctúa anualmente por mil causas pero es habitual la presencia de una población nidificante de miles de ejemplares en muchas zonas de la ciudad (Iglesia Arciprestal, plaza Jovellar, plaza de la Mera, Hospital de Vinaròs, plaza del mercado, etc.)

Una de las especies de profundo arraigo urbano es el avión común, grácil avecilla negra con una marca blanca encima de la cola y que hace sus nidos con mezclas de barro y saliva en fachadas, chaflanes, quicios, repisas, bordes, etc. Allí saca a su prole, aunque muchos se obstinen, cada año, en derribar sus nidos. Esta situación ocurre en muchos hogares particulares y en algunos lugares públicos. Una de las mayores poblaciones nidificantes de la ciudad de Vinaròs (Castellón) se sitúa en el Hospital Comarcal, cuyo periodo reproductor se extiende normalmente desde abril hasta agosto. Ya, durante la época estival de 2014, se comprobó la realización de tareas de eliminación de los nidos de la mencionada especie en distintas zonas exteriores de la fachada del edificio y, por increíble que parezca, las pasadas semanas se volvieron a repetir estos hechos a pesar de haber comunicado, por carta (el 5 de marzo de 2015), a la dirección del Hospital sobre la negligencia de estas actuaciones, sus consecuencias legales y sobre las alternativas a esta problemática.

Ecologistas en Acción ha realizado las pertinentes denuncias antes los estamentos competentes para paralizar estas actividades, sancionar a sus responsables y buscar soluciones para que no se vuelvan a repetir estos nefastos hechos.Recordemos que está penado por ley el derribo de sus nidos. Nidos que cada vez son más costosos de realizar por la especie, ya que cada vez llueve menos, cada vez hay más lugares asfaltados y campos artificializados, siendo su materia prima básica (el barro) más difícil de encontrar.

Recordemos que existen cajas nido específicas para fomentar la cría de la especie y que se pueden tomar otras medidas correctoras para evitar la insalubridad de los nidos (defecaciones) cercanos a balcones y fachadas.
Concienciémonos tod@s sobre la importancia de estas especies, su función beneficiosa para el hombre, la agricultura, etc., y para el mantenimiento de las cadenas tróficas y el medio natural.