El Ayuntamiento de Villanueva de la Cañada apuesta por un modelo urbanístico masificador y de fuertes impactos ambientales que afectará negativamente a los vecinos y al entorno natural. Ecologistas en Acción e Iniciativa Ciudadana Villanueva de la Cañada Sostenible (ICVCS) han pedido por escrito su retirada y la elaboración de un nuevo Avance abierto a la participación.

El 31 de mayo el Ayuntamiento de Villanueva de la Cañada dio a conocer públicamente el Avance de nuevo Plan General Municipal de Ordenación Urbana (PGMOU). Según los datos ofrecidos por el propio Ayuntamiento, dicho Avance propone la construcción de 6.893 nuevas viviendas que, sumadas a las 6.800 pendientes de construir del PGMOU vigente, llevarían a triplicar el número de viviendas actual y, por tanto, de habitantes del municipio. Asimismo, en el Avance del nuevo Plan se prevén nuevas carreteras, como la Ronda Este, que bordearía los límites del Parque Regional del Guadarrama, atravesando zonas verdes y montes protegidos, y la variante de la M-600 que acabaría por convertirse en la M-60 y cuyo trazado dividiría el municipio en dos.

Lo que propone el Ayuntamiento en el Avance es la recalificación de todo el suelo del municipio, excepto lo que está estrictamente protegido por ser parte del Parque Regional del Guadarrama. Renunciando de esta manera a su capacidad para establecer zonas no urbanizables de protección especial que son necesarias, por ejemplo, para crear una zona periférica de protección del Parque o para evitar que las zonas urbanas de Villanueva del Pardillo, Villanueva de la Cañada y Brunete formen un continuo en el futuro. El Avance deja así dos tercios de la superficie del municipio a merced de los promotores inmobiliarios y, lo que es peor, carentes de protección ambiental se lleven a cabo o no las futuras construcciones.

Hace tres meses la asociación vecinal Iniciativa Ciudadana Villanueva de la Cañada Sostenible alertó a los vecinos de los nuevos planes urbanísticos, repartiendo folletos en el pueblo y en las urbanizaciones contra la masificación que se prevé. A pesar de ello el alcalde mantiene sus planes y, además, pretende hacerlo abanderando la protección del medio ambiente.

LA FALACIA DEL CRECIMIENTO ORDENADO Y SOSTENIBLE

El Avance de PGMOU ha sido presentado como paradigma del crecimiento sostenible y de la protección ambiental. A la vista de los hechos dicho planteamiento no puede ser más falaz. El modelo que se plantea de ciudad extensa y de baja densidad de viviendas tiene importantes impactos ambientales y sociales que, además, cuando se lleva hasta el límite como es el caso, acaba por convertirse en el más insostenible, más aun que las grandes aglomeraciones urbanas.

El principal impacto del Avance es el aumento exponencial de la ocupación del suelo. A mayor número de viviendas de baja densidad, mayor necesidad de suelo recalificado y menor disponibilidad de suelo para zonas rústicas y naturales. En Villanueva del Cañada a razón de 10 a 13 viviendas/hectárea se ocupará todo el suelo hasta el mismo límite del Parque Regional del Guadarrama. Para dejar espacios a viviendas, viales y jardines se eliminarán por completo los ecosistemas naturales, se talarán cientos de encinas, se encauzarán los arroyos, y las pocas zonas forestales que se respeten serán una zona verde más. Pero no sólo los ecosistemas naturales desaparecen, también lo harán las actividades tradicionales como la ganadería, la agricultura o la caza.

Otros impactos críticos son el aumento del consumo del agua y de energía. De hecho, los suministros actuales no están en disposición de garantizar las nuevas demandas. Si ya hoy en día Villanueva de la Cañada sufre numerosos cortes de luz, en el futuro estos problemas serán aún mayores. Las ciudades de baja densidad consumen entre 2,5 y 4,5 veces más agua que las de media y alta densidad, y algo similar ocurre con el consumo de energía.

Pero el mayor impacto lo van a sufrir los habitantes de la localidad. Habitabilidad y movilidad se deteriorarán de la mano de la masificación y de la dispersión urbana. Las obras serán constantes y los ruidos irán en aumento en los próximos años. Asimismo el mayor número de habitantes colapsará las vías de comunicación existentes, lo que llevará a la construcción de grandes infraestructuras, como la M-60, y con ello la transformación de la zona será definitiva. Brunete, Villanueva de la Cañada, Villanueva del Pardillo, con los pueblos limítrofes, serán un nuevo, masificado y ruidoso Eje Pinar.

FALTA DE INFORMACIÓN Y PARTICIPACIÓN EN EL TRÁMITE DEL PGMOU

El Avance de PGMOU salió a información pública las pasadas navidades, curiosamente ni durante las elecciones municipales ni en los medios de comunicación del Ayuntamiento (página Web, revista Villanueva al Día) se ha informado de los planes urbanísticos que se promueven desde el equipo de Gobierno. Así, muy pocos vecinos saben realmente lo que es el Avance del PGOU y, lo que es peor, tampoco han sido consultados previamente a su elaboración.

Ecologistas en Acción y vecinos de la asociación ICVCS pudieron en el último momento presentar sugerencias al Avance que, a la vista de la información municipal, no han sido tenidas en cuenta.

EXIGENCIAS DE ECOLOGISTAS Y VECINOS

Dada la insostenibilidad social y ambiental del Avance de PGOU, Ecologistas en Acción e ICVCS consideran que debe ser retirado y sustituido por uno nuevo que fije unos límites definitivos al crecimiento urbano de Villanueva de la Cañada, sobre la base del respeto a los espacios protegidos, de los ecosistemas naturales y de los cauces y de los arroyos existentes, del mantenimiento de una identidad urbana separada físicamente de Brunete y de Villanueva del Pardillo y del rechazo a la creación de nuevas grandes infraestructuras como la M-60.