Ecologistas en Acción reclamará mañana en el Consejo de Participación atención a los problemas y carencias de Doñana en materia de biodiversidad y conservación.

Ecologistas en Acción afirma interesan más los intereses económicos de la periferia que lo relacionado con la conservación del Espacio Natural Doñana.

Así lo confirma, según esta organización, el propio Orden del Día del Pleno del Consejo de Participación de Doñana que tendrá lugar mañana día 11 de diciembre en Almonte, donde se incluye el debate sobre proyectos de ampliación de regadío y de una nueva variante de la carretera de El Rocío, sin aparecer el debate sobre los temas cruciales para la conservación de este espacio natural emblemático, como la restauración hídrica y la marcha del Proyecto Doñana 2005 o el asunto del gas, entre otros.

A esta sinrazón hay que sumar que no se ha convocado la Comisión de Biodiversidad en todo el año, aun existiendo problemas de calado como la situación de las aves migratorias o la fumigación en los pinares con insecticida no selectivo que condena a desparecer la biodiversidad entomológica y que Ecologistas en Acción ya ha denunciado públicamente.

Ecologistas en Acción reclamará mañana en el transcurso del Pleno Ordinario del Consejo de Participación de Doñana, que la gestión y la participación se enfoquen con mayor atención a la conservación de la biodiversidad – no se ha convocado la Comisión de Biodiversidad del espacio protegido ni una sola vez este año- y los ecosistemas del Espacio Natural y no se centren en los intereses económicos de la periferia, puesto que todo lo que está previsto debatir en dicha reunión está relacionado con proyectos de regadío y carreteras.

No se ha debatido en este Órgano de Participación la marcha del Proyecto Doñana 2005, el cual incluso ha llegado a dar por finalizado Fátima Báñez, Ministra de Empleo y Seguridad Social, en octubre pasado ante los medios de comunicación, cuando inauguraba los que el Ejecutivo consideraba «proyectos realizables», quedando aplazadas dos intervenciones vitales para la recuperación de la marisma de Doñana, que son la recuperación del Caño del Guadiamar y la recuperación del Brazo de la Torre. Estas dos importantes actuaciones pendientes, obras declaradas de interés general por el Estado Español, tienen su dotación presupuestaria correspondiente, por lo que no es de recibo ninguna revisión ni adaptación, sino su puesta en marcha dando continuidad al Proyecto Doñana 2005.

No ha tenido un papel relevante la Comisión Científica en la decisión de recuperación del estuario del Guadalquivir, con las restauración hídrica de las llanuras mareales y todos los brazos; Cerrado Garrido y Cochinato, dos fincas que eran importantísimas para ello, no están incluidas en la recuperación. Sin embargo, el Pleno tratará dos actuaciones, una en Hato Blanco y otra en Veta La Palma, en las que se propone seguir utilizando más recursos hídricos para el regadío y ampliar la superficie de regadío o agrícola en el Parque Natural de Doñana. Parece que Doñana está más al servicio de los intereses económicos de la periferia que de la conservación del propio espacio, máxime cuando ahora está completamente seco.

No se está prestando atención a las aves acuáticas, que con la falta de aportes de agua del río o de las cuencas vertientes, están desplazándose a zonas de la periferia, donde triste y desgraciadamente todas las fincas son cotos de caza. Se están cazando todas las especies migratorias que vienen a pasar la invernada a Doñana. Doñana no es ya un santuario para la fauna. Doñana es un santuario para el turismo y para los intereses económicos de la periferia.

No se ha debatido ni evaluado el proyecto de gas. Se ha declarado de interés social la continuidad de los sondeos y la explotación de gas, a pesar de que la Junta de Andalucía informó desfavorablemente en mayo pasado pero actualmente se limita a aceptar que los proyectos cumplan la norma. El Consejo de Participación estableció previamente que los proyectos debían ser evaluados en su conjunto para conocer sus respectivos impactos y las sinergias entre ellos. Los sondeos y el proyecto del gas tienen el beneplácito sin haber sido debatidos.

No ha habido exigencia de responsabilidades ni dimisiones ni autocrítica por la construcción de la Variante de El Rocío en la carretera A-483. Esta carretera supuso una inversión autonómica de 16 millones de euros, contó con Fondos FEDER de la Comisión Europea y fue ejecutada por la Agencia de Obra Pública de la Junta de Andalucía en el marco del Plan de Mejora de la Accesibilidad, Seguridad vial y Conservación en la Red de Carreteras de Andalucía (MASCERCA), se aprobó en 2007 y la puesta en servicio fue en 2012. Ahora se aprueba la construcción de una nueva variante de ésta que lleva inaugurada tres años porque no sirvió para nada, afectando en cualquier caso a Red Natura 2000 y al Espacio Protegido de Doñana. Esto es lamentable.

No se ha debatido la actuación de fumigación aérea de los pinares afectados por la procesionaria del pino con insecticida no selectivo. Para Ecologistas en Acción el control de esta plaga pasa por un plan de empleo en los municipios afectados, con cuadrillas especializadas destinadas al control de la población de procesionaria a medio plazo, actuando en todas las fases del desarrollo del insecto mediante técnicas sin impacto ambiental. Este punto ya ha sido denunciado públicamente por Ecologistas en Acción, que propone medios mecánicos que supongan una oportunidad de demostrar a la población local los beneficios de ubicarse dentro de un espacio protegido: la fumigación aérea envenena la zona y a todos los insectos y genera pocos puestos de trabajo.

Para Ecologistas en Acción todas estas ausencias en el debate del Plano del Consejo de Participación redundan negativamente en la gestión del Espacio Natural de Doñana, Patrimonio de la Humanidad y Sitio Ramsar, incluido en la Lista Verde de la Unión para la Conservación de la Naturaleza por la excelencia en la gestión de su humedal y valores culturales, por lo que toda vez se reclame mañana en el Plano del Consejo de Participación la atención debida a estos y otros asuntos en materia de conservación y biodiversidad. Estos asuntos serán elevados a la consideración de Europa, para su debate en el Parlamento y la Comisión.