Día Mundial de los Humedales

Con motivo de la celebración del Día Mundial de los Humedales, el 2 de febrero, Ecologistas en Acción denuncia la grave situación en la que se encuentran la mayoría de los humedales españoles y reclama medidas extraordinarias para mejorar la situación de 26 humedales gravemente amenazados

Desde 1900 han desaparecido el 64% de los humedales del planeta, pese a ser ecosistemas esenciales para la supervivencia de los seres humanos y de otros muchos animales. Los humedales nos aportan agua dulce, garantizan nuestro suministro de alimentos, mantienen la biodiversidad, nos protegen de las inundaciones y almacenan dióxido de carbono. También son esenciales para muchas actividades económicas. Además, se prevé que para 2025 un 35% de la población mundial estará directamente afectada por la reducción del suministro de agua. Esto se debe fundamentalmente a la actitud errónea de considerar a los humedales como terrenos baldíos.

En el Estado español la situación no es mejor. Durante el siglo pasado, y especialmente en la segunda mitad del mismo, se produjo en nuestro país la desaparición física de aproximadamente el 60% de la superficie ocupada por lagos y humedales. Y todavía hoy en día son muchos los humedales que cada año están desapareciendo o dañándose gravemente por la actividad humana: dragados, vertidos, contaminación, desecación, construcción de infraestructuras, desarrollos urbanísticos, caza, especies invasoras, etc.

Los 26 humedales más amenazados

Ecologistas en Acción ha analizado la situación de estas zonas húmedas identificando 26 humedales que, en estos momentos, se encuentran amenazados, desde grandes humedales con reconocimiento internacional hasta pequeños humedales sin ninguna protección olvidados por las administraciones.

Entre las muchas amenazas que sufren estos humedales destacan las relacionados con los cambios de los usos del suelo generados por la presión agrícola, la urbanización y la alteración de su régimen hídrico, especialmente por sobreexplotación de los acuíferos. Otros impulsores de la degradación de estos humedales son la contaminación y la introducción de especies invasoras y el cambio climático, cuyo impacto ya está siendo evidente en los ecosistemas acuáticos.

El sistema agrícola constituye una de las principales causas de la alteración o degradación de estos humedales al competir con ellos por los recursos hídricos, tanto superficiales como los subterráneos (por ejemplo, los regadíos próximos a las Tablas de Daimiel); por el desarrollo de cultivos intensivos y cada vez más tecnificados o por la masiva utilización de abonos, pesticidas y plaguicidas, que terminan incorporándose a los sistemas acuáticos a través de los excedentes de aguas de riego. Otras causas son la urbanización, el desarrollo de infraestructuras o el cultivo de arroz.

Ante esta situación, es imprescindible que las administraciones presten la necesaria atención a la conservación de los ecosistemas acuáticos, especialmente mediante su protección, para evitar la construcción de desarrollos urbanísticos e infraestructuras; la regulación y vigilancia de las actividades agrarias en el entorno de los humedales; la mitigación y adaptación frente al cambio climático, una mejor gestión del recurso hídrico impidiendo la sobreexplotación de los acuíferos y mejorando su depuración; mayor vigilancia y denuncia de los vertidos y la caza furtiva, así como un reconocimiento público de la importancia ecológica de nuestros últimos humedales.

Gran diversidad de humedales

El Estado español es, a nivel europeo, el país que cuenta con mayor diversidad en la tipología de zonas húmedas desde cualquier punto de vista desde el que se aborde su caracterización (genético-funcional, hidrológica, físico-química, comunidades biológicas, tamaño, etc.), reconociéndose la presencia de tipos ecológicos únicos en el continente europeo como son, por ejemplo, las lagunas interiores salinas o lagunas cársticas en yesos entre otras. Sin embargo, la importancia de este enorme y exclusivo patrimonio natural ha sido tradicionalmente infravalorada y poco percibida por la sociedad.

La desecación de humedales

El desarrollo de una legislación franquista que potenciaba la desecación de humedales por considerarlos insalubres, el avance de la frontera agraria, la escasa conciencia medioambiental, el progreso imparable de la tecnología, el desarrollismo urbanístico en los litorales y la construcción de infraestructuras son algunos de los elementos que se combinaron a largo del siglo pasado originando la pérdida de más de la mitad de los ámbitos palustres y lacustres españoles. Y esta desaparición o transformación de los humedales, que todavía existe, compromete en el medio y largo plazo el suministro de los servicios que prestan a la sociedad.

El aumento de las tasas de explotación de los procesos de abastecimiento, especialmente por lo que se refiere a los usos del agua, sustento básico de los humedales, está teniendo consecuencias nefastas para el mantenimiento de los procesos de regulación, que son los que en peores circunstancias se encuentran en la actualidad y cuyo futuro inmediato no es nada alentador. Esta situación contrasta, sin embargo, con el deseo de la sociedad de disfrutar cada vez más de unos ecosistemas acuáticos sanos y bien conservados.

Los humedales más amenazados

Aragón

Saladas de Monegros (Huesca, Zaragoza y Teruel)
En las tres provincias de Aragón hay una importante cantidad de lagunas saladas estacionales, algunas de ellas formando grandes complejos endorreicos como los de Alcañiz y Bujaraloz-Sastago (Monegros). Este último, con más de cien salinas, forman un conjunto estrechamente interrelacionado, considerado el más extenso de toda Europa y único por sus particularidades geomorfológicas, geoquímicas, hidrológicas, ecológicas y paisajistas en el contexto de Europa occidental, representado por especies y ecosistemas más propios de otros continentes como África y Asia. Actúa como una gran cuenca interconectada, en la que las acciones sobre una parte del sistema afecta al resto. Sin embargo, su estado actual, muy degradado debido a roturaciones, dragados, fertilizantes, pesticidas y basuras, sufre la amenaza definitiva de la transformación en regadío del Plan Monegros II, contemplado en el Plan de Demarcación del Ebro, recientemente aprobado y que no contempla las peculiaridades edafológicas, hídricas y biológicas que dan valor a estas zonas húmedas. De llevarse a cabo destruiría irremisiblemente tanta la dinámica actual de las saladas como sus biocinesis asociadas.

Laguna del Cañizar (Teruel)
La Laguna del Cañizar fue desecada en el siglo XVIII al responsabilizar a este humedal de una epidemia de paludismo que asoló la zona en aquella época, afortunadamente fue recuperada en el año 2008 y se logró detectar la presencia de 200 especies de aves, algunas de ellas realmente singulares. Actualmente su gestión se ha dejado en manos de la comunidad de regantes quienes abren o cierran las compuertas según sus intereses, decidiendo así en que momento la laguna tiene agua.

Andalucía

Humedal de las Turberas del Padul (Granada)
Este humedal forma parte del Parque Natural de Sierra Nevada, y está en la zona de máxima protección del parque, y también está declarado de importancia internacional en el Convenio de Ramsar, pese a lo cual está en una situación de abandono absoluto. La depuradora de la población, que vierte a la laguna estaba calculada para 5000 personas pero actualmente se cuadriplica esa población, por lo que aún funcionando no realiza una buena depuración, vertiendo agua fétida que está acabando con la vida del entorno. Además existe un problema de vertido de residuos sólidos urbanos, ante la inacción de las administraciones, y el centro de recepción existe no atiende al público.

Parajes Naturales ríos Palmones y Guadiaro (Cádiz)
Los Parajes Naturales de los ríos Palmones y Guadiaro en el Campo de Gibraltar- Cádiz están en peligro de extinción como consecuencia de la erosión antrópica, las llanuras de inundación se han rellenado con materiales permeables y se producen continuas extracciones de agua para construcciones urbanísticas.

Laguna de La Janda (Cádiz)
Esta Laguna fue desecada para la utilización como tierras agrícolas hace más de treinta años, pero las actividades agrarias que se realizan en esa zona no han sido tan rentables como se pretendía. Desde entonces, y con cierta frecuencia, la zona se ha visto inundada por los desbordamientos del río Barbate y Almodóvar en Cádiz. En los últimos años el paisaje agrícola de La Janda, que estaba formado por cultivos poco rentables de maíz, girasol, algodón o sorgo, ha pasado a ser un monocultivo de arroz, lo que supera toda racionalidad: se desecó una laguna para después inundarla para el cultivo de arroz, para lo que a su vez ha sido necesario construir el pantano del Barbate, que ha inundado miles de hectáreas de valiosos bosques y pastizales.

Salar de Los Canos en Vera (Almería)
La mayor amenaza de este humedal fue su declaración como urbanizable, a pesar de sus múltiples valores ambientales. En la actualidad es posible que se salve una parte de este humedal gracias a que ya se construyó en zona inundable y ahora para proteger a la población se verán obligados a construir una balsa de tormentas que ocupará parte de este preciado humedal.

Nacimiento de Los Molinos del Río Aguas en Sorbas (Almería)
En pleno Paraje natural del karst en yesos de Sorbas y entre paredes de cristal de yeso está a punto de secarse uno de los pocos cursos permanentes de agua de la provincia, el último oasis. La junta de Andalucía permitió la roturación de cientos de hectáreas forestales y la extracción de tres veces la capacidad de un acuífero de aguas fósiles para el olivar en intensivo.

Humedal de la Ribera de la Algaida, Roquetas de Mar (Almería)
Humedal costero temporal que destaca por su formación de saladar bien conservado y su alto valor ornitológico (canastera, cerceta pardilla, garcilla cangrejera, chorlitejo patinegro, avoceta, charrancillo, cigüeñuela…), pese a lo cual no se ha protegido y su supervivencia sigue amenazada por la fuerte presión urbanística y los conflictos de titularidad y competencia administrativa, zona potencial de deslinde y orla de protección litoral. El olvido por la administración ha favorecido actividades como el vertido de escombros, la práctica del motocross y tránsito de vehículos y la extracción ilegal de áridos que han provocado la desecación de varias charcas, destrucción de hábitats prioritarios y alto fracaso reproductor de la avifauna.

Laguna de Tarelo (Cádiz)
La Laguna de Tarelo forma parte del Espacio Natural de Doñana, en Sanlúcar de Barrameda, con una extensión 17 hectáreas, y es de origen artificial por excavación sobre arenas con destino a enarenar los cultivos y cuenta con importantes poblaciones de aves acuáticas amenazadas (malvasía, cerceta pardilla, espátula, garcilla cangrejera). Sus principales amenazas son el alto grado de eutrofización producida por la contaminación del acuífero por nitratos y fosfatos y por estar casi totalmente rodeada por cultivos agrícolas intensivos, que llegan hasta la misma orilla; la salinización debida a la evaporación y al ingreso de sales del acuífero en los periodos de lluvia; y la caza furtiva.

Lagunas de Bonanza (Cádiz)
Conjunto de 4 lagunas de origen artificial por excavación sobre suelo arenoso con destino a uso agrícola. Cuenta con interesantes valores naturales: población nidificante de malvasía cabeciblanca, avetorillo común, carricerín común, calamón común, ruiseñor bastardo… Mientras que sus principales amenazas son la eutrofización, ya que el acuífero está contaminado por nitratos y fosfatos, cultivos agrícolas intensivos en su periferia, extracción ilegal de sus aguas para riego, caza furtiva, residuos agrícolas en alrededores , y usurpación perimetral.

Laguna del Cortijo Viejo (Córdoba)
La laguna del Cortijo Viejo en Baena es el humedal más amenazado de la provincia. A lo largo de los últimos años la laguna ha venido soportando por sus diferentes propietarios un continuo proceso de destrucción y desecación que comenzó sobre la década de los años 70 y que a día de hoy continúa debido a los drenajes artificiales para evitar su inundación, pozos para extraer agua, intentos de cultivo de olivos en el interior del vaso lagunar, y la amenaza más reciente es el rellenado con tierra del vaso lagunar. Todo ello consentido por la pasividad de las administraciones.

Laguna Grande (Jaén)
La Laguna Grande, en Baeza, es la mayor laguna de agua dulce de la provincia y se encuentra gravemente amenazada debido a la ocupación por especies exóticas invasoras, la colmatación de la lámina de agua, la contaminación, la presión por el cultivo del olivar intensivo que la rodea, la utilización de pesticidas, la caza en su perímetro, y la utilización del agua por los regantes.

La Laguna de Medina (Cádiz)
La Laguna de Medina, en Jerez, es la segunda laguna en extensión de Andalucía, pero actualmente tiene un grave problema con el impacto producido por la introducción de carpas, que se intentó resolver sin éxito, problemas de colmatación y ha sufrido actos vandálicos en los equipamientos.

Catalunya

Delta de l’Ebre (Tarragona)
Se trata de uno de les humedales más importantes de la Península Ibérica y del Mediterráneo Occidental, con una superficie de 320 km2. Fue declarada Parc Natural en el año 1983 por la Generalitat de Catalunya, y está también en la Lista de Humedales internacionales (Convenio Ramsar). Sus principales amenazas son Plan de Cuenca del Río Ebro (2015); la contaminación del río en Flix y en Ascó, entre otros; el cambio climático y la consecuente regresión de los hábitats de las especies; así como el urbanismo y la presencia de actividad humana en zonas de alto interés en conservación.

Delta del Llobregat (Barcelona)
El delta del Llobregat es el segundo delta de la Comunitat Autònoma de Catalunya, ocupando un área de 98 km2 entre Montjuïc y el Garraf. Está formado por diferentes humedales de gran importancia en biodiversidad y en agricultura en el Área Metropolitana de Barcelona. No existe una figura de protección integral de todo el Delta del Llobregat. Las principales amenazadas son el urbanismo, las infraestructuras: una gran presión antrópica de la gran metrópoli des de aeropuertos, zonas industriales, zonas de ocio, las prácticas agrícolas insostenibles, la caza y el cambio climático.

Castilla-La Mancha

Embalse de Castrejón (Toledo)
En lo que respecta al Refugio de Fauna del Embalse de Castrejón las amenazas vienen derivadas del incremento del uso público incontrolado, la pesca furtiva con trasmallos y embarcaciones que afectan a colonias de garza real, imperial y martinete, el ensuciamiento por basuras en sus márgenes y zonas de dominio público y la escasez de caudales, lo cual determina la alta contaminación de las aguas del Tajo en su tramo medio y en consecuencia importantes afecciones a la fauna piscícola y ornitofauna, los niveles de tóxicos químicos de origen industrial en los organismos de estos grupos animales, nos consta se encuentran muy elevados y suponen importantes mortandades en sus poblaciones.

Reserva de la Biosfera de la Mancha Humeda: Ruidera y Tablas de Daimiel (Ciudad Real)
En lo que a Ciudad Real respecta es toda la Reserva de la Biosfera de la Mancha Húmeda la que está en peligro, pues aquí ningún gobierno se ha tomado en serio el control de las extracciones. De hecho, han presentado un recurso contra el nuevo plan hidrológico que trata de poner un mayor control sobre ellas. Con respecto a las Lagunas de Ruidera, la principal agresión es la urbanización descontrolada. Hay muchos casos flagrantes de incumplimento de la ley de aguas e incluso hay una sentencia de demolición de un centro de la propia junta pero que no se ha ejecutado. La presión turística también genera diversos impactos, especialmente en verano. En cuanto a las Tablas de Daimiel el problema principal es la extracción incontrolada del acuífero, pero últimamente también la contaminación difusa y los continuos episodios de contaminación localizada en los vertidos de las depuradoras de los pueblos aledaños que están poniendo en serio riesgo la biodiversidad del parque.

Euskadi

Marismas de Txingudi (Gipuzkoa)
Espacio marismeño situado en la desembocadura del río Bidasoa viene sufriendo desde hace varias décadas la ocupación del humedal con un colegio, instalaciones deportivas, y un aeropuerto, con sus correspondientes impacto. Se han incumplido los compromisos institucionales aprobados hace 20 años de restaurar la marisma. También se vienen produciendo bombeos de lodos en la marisma para facilitar la actividad de remo en la ría, y se han eliminado fangos y lodos ricos en nutrientes que constituyen hábitats prioritarios de la Red Natura. Además las islas del Bidasoa (zonas de especial protección para las aves) siguen todavía ocupadas por actividades agrícolas sin que se inicien las expropiaciones.
La construcción de un carril bici y paseo peatonal con un voladizo sobre la ría del Bidasoa a lo largo de 900 metros, provocará nuevas molestias a las aves por tránsito continuo de personas y supone una ocupación del Dominio Público Marítimos Terrestre.

Humedal de la Vega de Lamiako (Bizkaia)
El Humedal de la Vega de Lamiako es una pequeña extensión de terreno ubicada entre la desembocadura de los ríos Gobela y Udondo y la Ría del Nervión – Ibaizabal. A pesar de que a partir de 2011 está incluido en el Plan Territorial Sectorial de Zonas Húmedas de la CAPV en el Grupo III del inventario, carece de alguna clase de protección. Actualmente este espacio natural está amenazado por varios proyectos de construcción, como la edificación de una Planta Depuradora de Aguas Residuales. También padece la falta de gestión, que ha conllevado la proliferación de especies invasoras como el plumero de la pampa, Cortaderia selloana.

Humedal de Urdaibai (Bizkaia)
Este humedal forma parte de la Reserva de la Biosfera del mismo nombre y que es el de más importancia, tanto por su tamaño y como por su grado de conservación de Euskadi. Esta zona es muy relevante como área de descanso para las aves en los diferentes periodos migratorios y en la invernada. A pesar de todo ello, este ecosistema, así como el resto de Reserva, no dejan de estar bajo múltiples amenazas. La primera y más importante es la falta de un plan de desarrollo de la zona, lo que ha dado pie a un desarrollo urbanístico sin control (aumento desmedido del número de casas de segundo uso) y del número de proyectos innecesarios e incompatibles con la preservación del ecosistema, como el intento de construir la segunda fase del Guggenheim en Urdaibai. Otra amenaza es el vertido de aguas residuales sin tratar de la mayoría de municipios dentro de la Reserva y el dragado continuo de la ría para posibilitar la salida de barcos desde el astillero ubicado en el interior de la ría.

Madrid

Los Estragales Pinto (Madrid)
Los Estragales es el último de los humedales estacionarios de Pinto. La confluencia de estepas cerealistas y humedales otorga a este paraje una extraordinaria importancia ecológica. Entre las gravísimas amenazas que soporta este paraje podemos citar: la presión cinegética, que incluye un campo de tiro en sus cercanías; varios macro proyectos urbanísticos que lo arrasarían: Punctum Milenium y el Espacio del Motor y, la más reciente: el proyecto de apertura en sus terrenos de una gran mina de sepiolita. Este espacio debería ser declarado como suelo no urbanizable especialmente protegido.

Humedal de San Galindo (Madrid)
Gran parte del carrizal y el entorno del humedal de San Galindo, junto al río Tajuña, ha sido pasto de las llamas y de los tractores que han arado las tierras de todo el entorno de la lámina de agua, eliminando la vegetación que servía de protección y cobijo a la fauna, ocasionando una profunda alteración de un ecosistema protegido. Lo sucedido supone una agresión inaceptable que vulnera la normativa de la Comunidad de Madrid. La laguna de San Galindo es un espacio protegido de pequeñas dimensiones, tres hectáreas, junto al río Tajuña. Forma parte del catálogo de embalses y zonas húmedas protegidas de la Comunidad de Madrid.

Complejo lagunar de Velilla de San Antonio (Madrid)
Complejo lagunar de Velilla de San Antonio, incluido en el Parque Regional del Sureste en la Comunidad de Madrid. Su principal amenaza es la eutrofización causada por la lenta renovación del agua, vertidos y crecimiento de vegetación provocando episodios periódicos de mortalidad de peces y desaparición de aves acuáticas

Navarra

La Balsa de Pulguer (Navarra)
La Reserva Natural de la Balsa del Pulguer es un humedal rodeado de suelos salinos. A día de hoy la avifauna que poblaba este hábitat prácticamente ha desaparecido. A 1 km de distancia se encuentra la Planta de Tratamiento de Residuos Sólidos del Culebrete. Este Vertedero está a una cota superior que la balsa y comunicado con esta por un pequeño barranco. En alguna ocasión, con intensas lluvias los restos de lixiviados han llegado a la balsa por este barranco. Se cree que las aguas freáticas que también conectan con la Balsa puedan haber arrastrado contaminantes ya que la primera fase del vertedero no incluía una cubeta impermeable.

País Valencià

Cuadro de Santiago (Castellón)
El Cuadro de Santiago en Benicassim es una zona húmeda litoral que ha sido desecada sistemáticamente desde 1960, habiéndose construido toda una línea de edificios turísticos en primera y segunda línea de playa, y sobre la que siempre ha habido graves amenazas urbanísticas, pero que actualmente no cuenta con ninguna protección. Se trata de un extenso saladar con juncos, carrizos y zonas de Limonium, sarcocornias, especies típicas de humedales litorales levantinos y numerosas especies de aves, reptiles, y anfibios. Se trata de una zona de caza libre donde se realizan intensas prácticas silvestristas (captura de fringílidos de forma legal e ilegal). La zona sigue siendo drenada por bombeo y nadie ha parado su desecación.

Saladar de Agua Amarga (Alicante)
El saladar de Agua Amarga, es un humedal costero con el que se lleva una larga lucha de reivindicación. La construcción de la desaladora de Alicante supuso un impacto sobre el acuífero y su práctica desecación. Se ha denunciado varias veces el incumplimiento de las medidas correctoras que obliga a inundarlo. La ampliación del actual aeropuerto supone otra grave amenaza, aparte de las habituales por estar en una zona con gran presión humana.