• Ecologistas en Acción ha comenzado su programa de voluntariado para mitigar la catástrofe y sensibilizar sobre los efectos del gran incendio ocurrido en Doñana el pasado verano. Durante la jornada se han recogido dos toneladas de basura.
  • La organización exige la adecuada gestión del Parque Natural y de los residuos urbanos en las zonas colindantes al espacio protegido para prevenir incendios futuros.

El incendio de Doñana, denominado por la Junta de Andalucía como el “Incendio de las Peñuelas”, es una gran catástrofe ecológica que ha devorado más de 10.000 hectáreas de bosque y matorral, en su mayoría localizadas dentro del Espacio Natural de Doñana. El Espacio está incluido en la Red de Parques Nacionales y se distribuye por las provincias de Huelva, Sevilla y Cádiz, siendo reconocido como la mayor reserva ecológica de Europa. Cuenta con figuras de protección como Espacio Protegido Red Natura 2000, Reserva de la Biosfera y Sitio Ramsar, entre otras, por estar declarado como uno de los humedales de mayor importancia internacional.

En el incendio se vieron afectadas zonas de gran valor ecológico como el Médano del Asperillo y buena parte del cordón de lagunas del Abalario, los barrancos de escorrentía entre Mazagón y el arroyo del Loro, así como zonas de reproducción del lince ibérico.

Ecologistas en Acción pretende divulgar la idea de que la naturaleza no entiende de límites administrativos y que las malas prácticas generalizadas en los espacios no protegidos acaban repercutiendo en espacios que cuentan con figuras de protección. Es el caso del incendio de Doñana, que se inició fuera del Espacio Natural. Pero no sólo se trata de incidir en el origen del mismo por las malas prácticas de una carbonería, sino de comprobar sobre el terreno como a escasos metros del espacio protegido se acumulan cientos de kilos de residuos que pueden provocar desastres similares, o que se consienta la proliferación de especies exóticas invasoras, algunas de las cuales son pirófitas y tienen como estrategia para su expansión favorecer incendios, de los que salen con más ventajas que sus competidoras autóctonas.

La organización pone en marcha la Campaña “Doñana Revive” mediante un programa de voluntariado que incluye tres días de actuaciones en las que están previstas las siguientes actividades:

  • Retirar la basura de uno de los accesos a la playa afectado por el incendio, conocido como La Fontanilla.
  • Eliminación de plantas exóticas que van rebrotando con fuerza, entre las que se encuentran acacias, eucaliptos, carpobrotus y cañas.
  • Recolección de semillas en las zonas no afectadas para siembras directas y en vivero para futuras reforestaciones.

En la primera jornada se ha realizado tres actuaciones previstas en el programa de voluntariado “Doñana Revive” de Ecologistas en Acción. Más de 160 personas voluntarias sumaron esfuerzos. Tras una charla para informar sobre los problemas del entorno se iniciaron labores de recogida de residuos, consiguiéndose retirar más de 2 toneladas de basura en los límites del espacio protegido. Esta simbólica acción tiene el objetivo de sensibilizar a la ciudadanía y a las administraciones para evitar que la mala gestión de nuestros residuos sea el origen de incendios devastadores.

También se han eliminaron brotes de una especie invasora del género acacia que será uno de los objetivos de las siguientes jornadas de voluntariado. Estas especies representan un grave peligro por su capacidad para desplazar especies autóctonas. Además de las acacias se localizaron diversos cactus, kalanchoes y uña de gato.

Con estas acciones, de carácter testimonial, Ecologistas en Acción quiere difundir una cruda realidad: ningún espacio está a salvo de un gran incendio y éstos van a ser cada vez una amenaza mayor, debido al cambio global que incrementa los periodos secos y los fenómenos extremos. Esto se suma, en el caso de Doñana, al fuerte impacto derivado el uso intensivo del agua para la agricultura y el turismo local, provocando descensos del nivel freático que mantiene a la vegetación muy estresada. Este estrés facilita la colonización de especies exóticas, muy proclives además a inflamarse, y convierte la vegetación en un combustible rápido para el incendio.

La organización agradece a la Concejalía de Mazagón por la cesión del Salón de Actos de la Mancomunidad, para que nos permitiera realizar la charla de inicio. Así como a Bonafrú, Sociedad Cooperativa Andaluza Hortofrutícula de Bonares, que donó guantes para el voluntariado, capazos para la recogida de vidrios y bolsas de basura para recoger plásticos y latas. Y sobre todo quiere agradecer a todas las personas que han actuado como voluntarias, tanto a las que han podido participar como las que no obtuvieron plaza. La recogida se realizó en dos puntos: Área de La Fontanilla, en los límites del Espacio Natural Doñana y en la Zona del Parador a las Huesas, dentro del Espacio Natural Doñana.

La siguiente jornada de voluntariado tendrá lugar a mediados del mes de diciembre.