DECLARACIÓN DE MOLINS DE REI SOBRE LA MODIFICACIÓN DE LA POLÍTICA EUROPEA DE RESIDUOS
Ecologistas en Acción se ha unido a los numerosos colectivos que han firmado el Manifiesto de Molins de Rei. Este documento aboga por una política española y europea de residuos respetuosa con el medio ambiente y que proteja la salud de las personas.
El manifiesto solicita:
1) que el estudio del Ciclo de Vida sea complementario a la jerarquía actual, que no la sustituya
2) que la UE dirija la prevención (fijando objetivos y medidas de reducción)
3) que se continúe con la sociedad del reciclaje
4) que se rechace la incineración
5) que se minimicen el transporte y la exportación de residuos
“POR UNA NORMATIVA EUROPEA DE PREVENCIÓN DE RESIDUOS, DE DEFENSA DEL MEDIO AMBIENTE Y DE LA SALUD DE LAS PERSONAS”
Ante los cambios que se proponen en el marco legislativo en materia de gestión de residuos de la Unión Europea, las entidades, plataformas y colectivos que nos hemos reunido en Molins de Rei queremos hacer las siguientes reflexiones:
Las nuevas propuestas sobre la política de gestión de los residuos -tanto la Estrategia temática de prevención y reciclaje de Residuos como la revisión de la Directiva marco de residuos- no establecen claramente un orden de prioridades entre los cinco niveles de la jerarquía de sistemas de tratamiento de residuos – prevención, reutilización, reciclaje, valorización energética y eliminación – y clasifican la incineración de residuos como recuperación únicamente sobre la base de criterios de rendimiento energético, sin tener en cuenta los impactos ambientales y sanitarios y la eficiencia en el uso de recursos.
El paquete de propuestas tampoco fija unos objetivos de reciclaje de residuos orgánicos para la Unión Europea (UE). Este es un mal cambio de orientación política ya que se abandona el impulso activo de la gestión de residuos desde la UE hacia la prevención, la reutilización y el reciclaje en favor del vertido y la incineración.
Por todo eso, pedimos al Parlamento Europeo y al Ministerio de Medio Ambiente del Estado español que tengan en cuenta las siguientes consideraciones, apoyen este manifiesto y lo comuniquen a las autoridades ambientales de la UE:
1. La 'modernización» de los criterios con la incorporación de instrumentos como el Análisis de Ciclo de Vida (ACV) debe ser un complemento, no un sustituto, de la jerarquía ecológica
1.1. Se debe confirmar la jerarquía ecológica de gestión de los residuos como base de regulación y planificación en la gestión de residuos y aclarar cómo se debe utilizar el ACV dentro de esta jerarquía y los planes de gestión de residuos.
1.2. Hay que defender y restaurar la jerarquía diferenciada aplicando criterios de precaución, prevención, reutilización, reciclaje y eliminación/incineración.
1.3. Hay que garantizar que es prioritario el reciclaje frente a la incineración: que la recuperación material no se vea condicionada o degradada por los estándares del CDR (combustible derivado de residuos), de eficiencia de la incineración o de una definición inadecuada del reciclaje.
2. Liderazgo de la UE en la prevención de residuos
2.1. La Estrategia temática no establece objetivos obligatorios de reducción de residuos:
La Comisión europea (CE) debe asumir su responsabilidad y establecer como prioritaria la prevención de residuos. Se deben imponer unos objetivos comunes y mesurables de prevención de residuos a nivel de la UE a alcanzar en 2010 (10% de reducción en cantidad y en toxicidad tal y como pide el 6º PAM). Pedimos al menos una reducción del 10% en 2010 respecto de la producción de 2005, tanto en residuos municipales como en residuos peligrosos. La CE debe emprender un proceso de evaluación propio con indicadores mesurables
2.2. La Comisión europea debe establecer medidas e instrumentos operativos a nivel de la UE y no sólo a nivel estatal:
Es insuficiente marcar la obligación de realizar programas estatales de prevención si no se concretan medidas clave tales como: establecer un calendario y un proceso de trabajo continuar con la legislación sobre la responsabilidad del productor decidir una definición común de la prevención desarrollar indicadores de prevención y reciclaje a nivel de la UE aplicar medidas económico-fiscales obligatorias: tasas para los productos de usar y tirar, para los residuos destinados a tratamientos finalistas (vertido e incineración,.) crear un grupo de trabajo europeo sobre prevención de residuos promover la participación real de las entidades ecologistas y la sociedad civil europea en las decisiones
2.3. Se han de reconocer e impulsar los pilares fundamentales de la prevención de residuos que debe promover la Estrategia Temática de Prevención y Reciclaje de Residuos: Defender una política ecológica de producto que sea efectiva Restringir el uso de sustancias tóxicas y peligrosas en la producción de bienes y servicios. Establecer estándares de ecodiseño en productos y procesos productivos
3. La Unión Europea debe ser una sociedad basada en la prevención y la recuperación de los residuos
3.1. Rechazar cualquier paso atrás respecto al marco legislativo existente, y a la legislación sobre flujos de residuos en particular (Directiva de regeneración de aceites usados, de Pilas, de Envases, de REEE, Propuesta de Directiva de Residuos Biodegradables,..).
3.2. Reconfirmar los objetivos de recuperación y la responsabilidad del productor con la legislación como principal mecanismo impulsor;
3.2.1. Rechazar la subsidiariedad de la política de residuos limitada al nivel estatal debido a que tiende a la desarmonización, comporta menos control de los objetivos, dilata los cumplimientos, etc
3.2.2. Reconocer la importancia del papel de los niveles de calidad para productos y procesos como condición necesaria pero no suficiente de una política de impulso del reciclaje en sentido amplio
3.3. Definir claramente el reciclaje excluyendo recuperación energética y química.
3.4. Marcar objetivos concretos de recuperación de residuos: el objetivo concreto de la UE como “sociedad de la prevención y la recuperación”, potenciando una gestión de los residuos eficiente sin generar impactos ambientales, mediante el objetivo de minimización de los residuos finales. Por ejemplo, pasar de la situación actual del 70% destinado a eliminación y del 30% destinado a recuperación a la situación inversa (30/70) en el año 2015.
3.5. Establecer una fecha límite para la aprobación de una Directiva de residuos biodegradables: que la Comisión europea incluya la obligatoriedad de la recogida selectiva de residuos orgánicos, objetivos de reciclaje y un plan de acción para evaluar la necesidad de herramientas similares en otras corrientes de residuos prioritarios.
Es necesario que la legislación establezca un criterio claro sobre la recuperación de la materia orgánica y la aplicación de tratamientos mecánico-biológicos para su valorización mediante la obtención de biogás: que sea prioritaria la recuperación material de la materia orgánica con recogida selectiva obligatoria y no se considere como valorización de materia orgánica la energía obtenida a partir de procesos de digestión anaerobia de residuos no recogidos selectivamente.
3.6. Rechazar la derogación de la directiva de aceites usados: especialmente, la pérdida de la prioridad de la regeneración (reciclaje), sin pruebas sustanciales ni argumentos medioambientales significativos a favor de tal derogación, ya que fomenta su incineración.
3.7. Cuestionar la conveniencia de establecer estándares de reciclaje en la futura ampliación del alcance de la Directiva IPPC o a través la comitología .
4. Rechazar la incineración
4.1. Rechazar cualquier paso atrás en la jurisprudencia actual, en particular la interpretación actual (ECJ) de recuperación en cuanto a incineración de residuos municipales.
4.2. Mantener los criterios de la Jerarquía ecológica del tratamiento de los residuos de tal manera que para determinar el tipo de tratamiento de los residuos se escoja preferentemente el que esté en un grado superior de la jerarquía. Reconocer que para evaluar la clasificación de la incineración se debe utilizar un enfoque de criterios múltiples, no basarse sólo en criterios de eficacia energética.
4.3. Reconocer que los residuos peligrosos que puedan ser reutilizados o reciclados, o que estén mezclados, no deben formar parte de una política energética (como energías renovables o biocombustibles).
4.4. Garantizar que no se podrá reclasificar un residuo como material secundario en los residuos destinados a ser usados como combustible.
4.5. Homogeneizar los criterios de control de emisiones para todas las instalaciones que utilizan residuos como combustible, independientemente de su clasificación: se aplicará la misma normativa de las incineradoras a las cementeras, centrales térmicas, fábricas de cerámica, fundiciones, plantas de coincineración, …
4.6. Proponer una moratoria para los residuos destinados a la incineración o coincineración: aplicar el principio de precaución y prevención y evitar la dispersión de contaminantes. No permitir la combustión de residuos en la fabricación de cemento, productos cerámicos, etc..
4.7. Garantizar el rigor científico y la claridad en la terminología, eliminando los eufemismos que a menudo acompañan y maquillan las nuevas prácticas incineradoras con la intención de hacerlas más bondadosas. Ejemplos: “valorización” , “menú preparado”, “biomasa”…
5. Priorizar la minimización de movimientos y exportación de residuos
5.1. Definir como prioritarios la minimización y el principio de proximidad en los movimientos de residuos: en los movimientos y exportaciones de residuos, tanto dentro como fuera de la UE, aplicar, en la medida de lo posible, el principio de proximidad.
5.2. Reconocer la aplicación del principio de precaución para proteger el medio ambiente y la salud de las personas. Las operaciones mercantiles de recuperación y transporte de residuos, incluso dentro de la UE, pueden provocar serios problemas de ecodumping.
Además de estas cinco áreas clave el Parlamento y el Consejo deben encarar algunos asuntos transversales:
6. Definiciones de residuos:
Garantizar que ninguna rendija legal permita eximir determinados subproductos de ser considerados residuos o que se permita una reclasificación inadecuada.
7. Gobierno, aplicación y control: Establecer un grupo de trabajo de residuos a nivel de la UE bastante amplio como por garantizar el seguimiento por parte de los agentes implicados y el control democrático en el proceso de comitología. Hacer frente a la ausencia de controles a nivel de la UE y de mecanismos de seguimiento de la aplicación. Promover mecanismos efectivos para garantizar la participación real de las entidades ecologistas y la sociedad civil europea en las decisiones.
8. Mantener la legislación actual en cuanto a residuos peligrosos
Rechazar cualquier paso atrás de elementos clave de la legislación actual en cuanto a niveles de protección exigidos para la gestión de residuos peligrosos – en particular respetar las listas de definición de peligrosidad, las normas de no mezclar y la gestión de residuos peligrosos domésticos.
Las entidades ecologistas y plataformas firmantes nos comprometemos:
A realizar acciones de sensibilización social, de divulgación, reivindicación y presión a las administraciones competentes en residuos y al sector industrial, poniendo en marcha una campaña con diversas actuaciones:
Iniciar una Campaña de Difusión de esta Declaración a favor de una política de prevención de residuos:
1. “Campaña por una normativa de prevención de residuos, de defensa del medio ambiente y la salud de las personas”
Acciones diversas para difundir la Declaración y la prioridad de reducir los residuos, dirigidas a: entidades cívicas la sociedad civil centros de investigación medios de comunicación
Organización de actos de divulgación y de acciones reivindicativas y de denuncia: que evidencien la responsabilidad de los productores de residuos de usar y tirar (p.e. organizar simultáneamente en diferentes países acciones de denuncia) contra instalaciones de tratamiento finalista de residuos contra la incineración de residuos: cementeras, centrales térmicas, etc. Acciones dirigidas a los responsables de las administraciones competentes en materia de residuos nacionales, estatales y comunitarias. (Antes de abril con cartas, entrevistas, correos electrónicos, etc.) Juntar esfuerzos entre las diferentes entidades del estado y europeas adaptando la campaña “Demos el Primer paso. Entidades catalanas por la prevención de residuos” a cada territorio de las entidades que aprueben la Declaración de Molins de Rei (Países Catalanes, estado, comunitario)
2. Proponer la constitución del “Día Europeo de prevención de Residuos”
3. Poner en marcha una Iniciativa Europea de Derecho de Petición al Parlamento Europeo en la que reclamamos una revisión de la Directiva Marco de Residuos con los criterios expuestos en el presente Manifiesto de Molins, en la que los sectores sociales pidan que el Parlamento Europeo apruebe una Decisión o resolución.
4. Establecer una coordinación entre entidades y plataformas con conflictos relacionados con el tratamiento de residuos: Intercambio de información entre las diferentes entidades y plataformas
5. En el ámbito estatal de la transposición de la Directiva de envases: proponer una interlocución con el Ministerio de Medio Ambiente entre las entidades ecologistas de los diferentes territorios del Estado, para que el Ministerio se posicione sobre la redacción de la Ley con criterios y medidas concretas de prevención y reutilización de envases, y a favor de la responsabilidad del productor.
