Tras estar abierto el plazo de alegaciones para la Licencia de Apertura de Obras del Aula de la Naturaleza a realizarse en la Finca Cortijo La Alcaidesa (San Roque) por parte de Emgeal, Ecologistas en Acción del Campo de Gibraltar ha presentado en el día de hoy alegaciones al respecto.

Las mismas se han basado en las siguientes circunstancias:

(1º) La necesidad de que se realicen actividades de promoción ambiental de forma prioritaria en la Finca La Alcaidesa, enfatizando en que la misma fue adquirida por la Junta de Andalucía precisamente con ese condicionamiento.

(2º) Se tenga en cuenta que la misma conforma El Corredor Verde Guadiaro-Guadalquitón con el Parque Natural de los Alcornocales; corredor que a iniciativa nuestra se estudia la viabilidad de declarar por su gran riqueza ecológica.
Conviene explicar que los corredores ecológicos desempeñan un papel de vital importancia para la conservación de la biodiversidad y la conexión de zonas geográficas.

En este caso constituyen principales objetivos del mismo: (a) La unión del Parque Natural de los Alcornocales con uno de los últimos reductos de costa virgen de litoral Mediterráneo (Guadalquitón); (b) La concreción de un desarrollo sostenible entre un área profundamente industrializada (la existente en la bahía Algeciras), un área semi-virgen (el Parque Natural de los Alcornocales) y una urbanizada (la urbanización Sotogrande); y (c) La conservación de un monte mediterráneo con una riqueza florística y faunística inigualable.

(3) La gran riqueza ecológica que posee la finca.- La Alcaidesa -ubicada al norte del término municipal de San Roque- conecta con la finca Mojones Blancos a la Sierra Almenara, delimitando al norte con Castellar de la Frontera, y el arroyo Guadalquitón, al este con Dientes Alto y Bajo y arroyo de Dientes, y al Sur con la Sierra del Arca, Carbonera y el Pinar del Rey-, es portadora de una riqueza ecológica inigualable, en donde los acebuches (conformando las formaciones vegetales más valiosas y mejor conservadas de la zona), alcornoques y pinos piñoneros conforman las formaciones vegetales más valiosas y mejor conservadas.

A su vez, 50 Has. de su suelo arenoso han sido repobladas de Pinos Piñoneros, y en las zonas más húmedas se aprecian quejigos y algarrobos, destacando una valiosa vegetación rupícola en los tajos y lajas que se desarrollan en las orillas de los arroyos dominadas por los fresnos.
Las particulares características de la zona, en su mayor parte monte Mediterráneo, determinan su indudable riqueza vegetal, en la que destacan formaciones de gran valor ecológico (el alcornoque, el acebuche, el lentisco, el bosque de laurel con adelfas y rododendros (según el suelo), así como una tierra rica, y la existencia de endemismos únicos en la península.

Abrigada por esta valiosa vegetación, se conserva una numerosa y diversa fauna con casi 150 especies de aves divisadas y estudiadas sobre el terreno; incluso el águila real ha sido vista en estos parajes en numerosas ocasiones.
Generando todo ello que esta área de la Comunidad Andaluza constituya un patrimonio natural con unos valores que lo sitúan a la cabeza de las regiones de Europa.

Concretamente, el estado arbustivo se encuentra compuesto entre un 50 y un 75% por lentisco, coscoja, sabina, pino piñonero, mirto, piruétano, Phyllirea angustifolia, callicotome vilosa, ulex parviflorus.

En el terreno puede constatarse la presencia de numerosos endemismos florísticos, como Euphorbia baetica, Genista tridens, Ononis leucotricha, Stauracanthus genistoides y Sideritis arborencens ssp perezlarae (especie vulnerable según catálogo de Flora Amenazada de Andalucía); el ecosistema en cuestión sirve de soporte a especies endémicas y amenazadas.

Destacándose de su flora: el lentisco, la cornicabra, el olivillo, el rusco, el palmito, el bayón, el sanguino y la coscoja. Así como una gran abundancia de enredaderas, como ser la parra silvestre, madreselvas, clemátides, zarzas, zarzaparrilla, etc..

La hacienda es atravesada por varios arroyos importante, destacándose Los Palanceros, y La Alhaja que desemboca en el arroyo de La Madrevieja, un afluente del río Guadarranque; arroyos de enorme importancia para la supervivencia de la fauna que habita la zona.

Posee abundancia de rapaces (Azor, Ratoneros, Águilas Perdiceras y Culebreras, Milanos Negros y Águilas Calzadas…), siendo atravesada por innumerables rutas migratorias de aves.

Sin embargo, una de sus grandes peculiaridades son los grandes herbívoros (Ciervos, Gamos, Corzos, Muflones y Jabalíes), así como los medianos y pequeños predadores del bosque y matorral Mediterráneo, tal es el caso de los Tejones, Meloncillos, Jinetas, y Zorros.

A su vez, este monte Mediterráneo, en su tramo final llegando a la playa, también está fuertemente ligado a la historia y cultura andaluza, prueba de ello son los numerosos vestigios que se han encontrado y continúan encontrándose en el lugar, consistentes en restos arqueológicos procedentes del Pleno Bronce.

(4) Por su gran valor ecológico, así como por los fundamentos de su propiedad pública, resulta inverosímil que se realicen pistas para el paso de vehículos de tracción a las cuatro ruedas, puesto que generaría un impacto muy significativo sobre la finca.

Señalándose que el camino existente, Mojones Blancos, ya ha ocasionando más que suficiente y verdadero impacto negativo sobre la flora y fauna.

Por ende, entendemos sería conveniente no asfaltar el mismo, y mucho menos construir nuevos carriles, ajustando que la entrada de vehículos fuera la mínima, y solamente en lugares señalizados; los autos y el tránsito continuo producirían afectaciones muy importantes.

Por ello, sería mejor hacer senderos, o lugares para acceder mediante burros o caballos (promocionando la vida al aire libre para sus visitantes)

(5) En relación al Cortijo de la Finca resulta esencial se respete por completo su infraestructura, tanto a causa de su patrimonio arquitectónico, como histórico, así como por constituir un “todo” con el paisaje de la zona.

(6) A consecuencia de las razones que motivaron a que la Junta de Andalucía adquiriera estas hectáreas -la promoción ambiental-, así como por su altísimo valor ecológico, resulta necesario se confeccione y efectúe un Plan de Uso y Gestión de la finca, que tenga por objeto los siguientes extremos:(a) la promoción de sus riquezas, como ser el monte mediterráneo; (b) la regeneración forestal de la vegetación natural de la zona; (c) el aprovechamiento racional e integral de los diversos recursos ganaderos, forestales, y recreativos de la finca; y (d) la conservación de la riqueza faunística de la zona.

Sin perjuicio de que cada actuación debería llevar un previo estudio sobre los impactos y consecuencias ambientales sobre la finca de la Alcaidesa.

(7) Por último se ha solicitado integrar la Comisión de Trabajo de la empresa EMGREAL, puesto que la asociación considerado haber tenido un rol muy importante en la protección de este inigualable lugar, cuyos valores ambientales son extraordinarios; papel que pretende continuar poseyendo.