Ecologistas en Acción de Córdoba ha dirigido cartas a los Claustros de Profesores y a las Asociaciones de Madres y Padres de los institutos, y colegios de infantil y primaria de la capital. En ellas se sugiere que se tengan en cuenta una serie de consideraciones referidas a los zoológicos y en especial al de Córdoba, con el ruego de que se desestime la organización de visitas a este tipo de centros por pensar que es una opción educacional muy poco válida y de efectos negativos. Así mismo se ofrecen alternativas al uso del recinto.
En estas cartas se manifiesta que:
Los zoos son lugares donde los animales se encuentran privados de libertad con el objetivo de distraer a los visitantes. Esto va en contra de los Derechos de los Animales sin justificación válida.
Igualmente se expresa la creencia de que es un error pedagógico pretender conocer a un animal sólo por su aspecto externo y el comportamiento anormal que muestran en estos centros, de donde se sale con una “pobre imagen” – cuando no deprimente – del animal y de quien allí lo mantiene.
Asimismo se considera lamentable que en pleno siglo XXI se defienda y apoye como una opción educacional válida la existencia de Zoo(i)lógicos, pues en la actualidad hay multitud de recursos audiovisuales que permiten conocer y estudiar a los animales sin sacarlos de su ambiente.
Como alternativa se exige a los responsables políticos municipales de Córdoba:
El traslado de los animales, como un mal menor, a grandes centros en semilibertad para adaptación previa a la libertad de aquellos que se pueda.
Que no se siga malgastando dinero en mantener ni ampliar este centro de confinamiento animal.
La redefinición de los objetivos y fines de las instalaciones municipales liberadas, tendentes a materializar un proyecto que dote a la ciudad de un amplio banco de recursos en materia de Educación Ambiental y de zona verde de uso público controlado.
Adaptación de parte de las instalaciones como infraestructura de apoyo para Planes de Recuperación de Fauna Silvestre Autóctona en colaboración con otros organismos.
Se termina sugiriendo a los educadores que tengan en cuenta todas las consideraciones expuestas a la hora de programar sus actividades extraescolares y rogando desestimen la posibilidad de organizar visitas al zoo(i)lógico de Córdoba o a cualquier otro.